Las dos tragedias ocurrieron en los puntos peor iluminados de la dársena

Montse Carneiro A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

ANGEL MANSO

Un tramo de balizas está apagado y delante del Náutico hay farolas que no funcionan

11 abr 2017 . Actualizado a las 23:17 h.

El perímetro de la dársena recibe un tratamiento lumínico desigual que cuida los tramos más frecuentados y deja en tinieblas, por diferentes causas, los recorridos y rincones más alejados, pero no por ello menos expuestos a accidentes. Al contrario, el alumbrado en torno a los pantalanes centró buena parte de las críticas y de las soluciones a la falta de seguridad en la zona tras la muerte de dos personas en las últimas semanas y al menos una de ellas se produjo en condiciones de penumbra total.

En la explanada anterior al Náutico que funciona de aparcamiento ninguna de las tres farolas que deberían iluminar el lugar funcionaba el día que Mateo González perdió la vida cuando hablaba por teléfono al borde del cantil y se precipitó al pantalán de los barcos deportivos. Lo denunció esta semana un compañero del actor que participó en la cadena humana que formaron amigos y colegas para exigir medidas de seguridad y ayer las lámparas seguían fundidas o fuera de servicio. Su mantenimiento depende del Real Club Náutico, que disfruta de una concesión administrativa otorgada por la Autoridad Portuaria y, como ocurrió aquella noche con la fiesta posterior a los premios de teatro María Casares, con frecuencia acoge en su bar celebraciones de grupos programadas con antelación.

En las otras tres líneas de cantil de la dársena, en los que las competencias en materia de iluminación recaen sobre el Ayuntamiento, el sistema de alumbrado quedó organizado tras la reforma de la Marina mediante un alineamiento de farolas dobles con bombillas led separadas 15 metros del borde y una discreta hilera de regletas de luz empotradas en el suelo a pocos centímetros de la orilla y colocadas a unos seis metros de distancia unas de otras.

El uso de estas balizas luminosas entraña una importancia capital. Alertan del inmediato cantil y así funcionan en la franja de los parques infantiles al pie de las galerías. En los otros dos tramos, sin embargo, están inutilizadas. El lado del Parrote apenas conserva lámparas que emitan luz. Están destrozadas y en el hueco que quedó al aire crecen hierbas y se acumulan colillas. El lado de enfrente, el más cercano al centro de ocio del puerto, tiene las regletas aparentemente en perfecto estado, pero al menos esta semana ese lado no se había encendido. Un déficit de luz importante en el lugar donde murió el joven de Mesía Manuel Rodríguez.

El banco será como los de la plaza de España y habrá más barandillas

El Ayuntamiento envió ayer a los medios de información los dibujos de detalle del banco corrido que instalará alrededor de la dársena, que en realidad consiste en un alineamiento de bloques de granito similares a los que amueblan la plaza de España, de 2,52 metros de largo, 0,42 de alto y 0,60 de ancho, con espacios vacíos en algunos lugares para permitir las maniobras que requiera la actividad portuaria. La distancia al cantil será de 3,5 metros.

El gobierno local, que el 28 de agosto pidió permiso a la Autoridad Portuaria para instalar bancos (concedido el 1 de septiembre), también modificará las barandillas: eliminará la que protege la escalera de piedra de acceso al pantalán de barcos pesqueros en la esquina enfrente de la fachada posterior del Teatro Rosalía y la sustituirá por una más larga, en el mismo lugar, y colocará una nueva de dos tramos en la esquina del Parrote.