La artista que ganó «Operación Triunfo» apadrinada por Ristro Meijide, llega con aires renovados
19 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Viene sola ante el peligro. Virginia Maestro se presentará en solitario hoy ante el público coruñés (Mardi Gras, 21.00 horas, 8/10 euros). El esqueleto lo pondrán con las canciones de Blue Bird, un disco con el que arrancó una etapa al margen de su paso por Operación Triunfo, su padrino Risto Meijide y la multinacional Sony.
-Un disco totalmente americano ¿Había esa intención?
-Es inevitable. Se trata de la música que más he oído. A la hora de elegir los timbres y los arreglos tienden a eso.
-Es amable, fácil de escuchar.
-Sí, tiene mucha luz, con estructuras fáciles y hasta un cierto punto es predecible. Hay canciones agradables, que recuerdan diferentes lugares de América. Unos temas tiran más al folk, otros más al rock and roll. En el fondo es pop bañado de muchas influencias.
-¿Retro-pop?
-Sí, me parece bien. Ni es folk, ni country, ni soul, pero convergen todos en el pop. Hago un pop que tiende al pasado y es muy retro.
-Dicen en la promoción que ha decidido no mirar atrás.
-Es aparcar el pasado, pero no en negativo. Blue Bird es un punto y aparte porque hay una ruptura en la discografía y un inicio de la independencia en la producción.
-¿Da vértigo eso de pasar de ser una artista del «mainstream» a la independencia?
-Entiendo que desde fuera pueda parecer eso, pero yo empecé desde abajo. Yo escribía canciones desde que tenía 11 años, tocaba en garitos a los 15 y no paré hasta los 25, que me presenté a OT. A partir de ahí aparece lo de Sony durante siete años. Pero nunca me he sentido una artista mainstream, ni indie. Eso sí, me he sentido siempre muy independiente artísticamente. Siempre he pendulado así, al margen del programa o de la discográfica.