«Si el alcalde conoce tantos delitos de los empresarios, que vaya al juzgado»

La Asociación de Emprendedores de Galicia, Ascega, viene alertando desde hace un tiempo sobre hechos como que «no hay proyecto de ciudad». Ahora, según afirma su presidente, Alfonso Salazar, no es la única entidad que lo hace: «En lo que venimos denunciando desde hace año y medio ahora nos vemos respaldados por el resto de asociaciones empresariales como Aproinco y Apecco, y nos tememos que van a salir más asociaciones».

-¿De qué tipo?

-Asociaciones vecinales que están viniendo a todos nuestros actos y nos dicen que en los barrios existe una paralización de los planes de conservación. Esto se ha convertido en un clamor ciudadano y asociativo. Y es que a este gobierno municipal le asusta la libertad y se está viendo con casos como el del centro de salud de Santa Lucía.

-Ustedes insisten en que se está frenando la iniciativa privada...

-Nos parecen fuera de lugar y vergonzosas las declaraciones del alcalde y del concejal de Economía Social criminalizando a la iniciativa privada. Este gobierno no solo no cree en ella, sino que está en contra y las últimas declaraciones así lo refrendan. Hablan de delincuencia organizada por parte de los empresarios y eso lo dice el alcalde, un magistrado suplente, que si conoce tantos delitos y hay tantas infracciones tiene que ir al juzgado y denunciarlas porque si no lo que está haciendo es tapando delitos. Es mentira que nosotros no queramos cumplir las leyes. Las licencias tienen un tiempo de concesión de tres meses y lo que están haciendo es inventando informes y contrainformes para paralizar la ciudad. Ellos son los que no están cumpliendo obligando a muchas empresas a no contratar. Y así estamos, que esta ciudad ha pasado de ser generadora de empleo a destructora y al ritmo que vamos llegaremos a los 20.000 parados.

-¿Tienen ustedes problemas con los funcionarios municipales a la hora de tramitar las licencias?

-Se ha puesto en tela de juicio la honorabilidad de los funcionarios municipales cuando lo que ocurre es que todos los que no se pliegan a los caprichos del gobierno municipal se convierten en sospechosos y son apartados del día a día del funcionamiento de la Administración municipal.

-Entonces, ¿dónde está el problema con las licencias?

-En los protocolos que están poniendo en práctica, que lo único que hacen es retrasar los trámites normales. Y eso cuando vemos como el gobierno municipal incumple las normas, se saltan del Plan General y por eso hay gente que se ha marchado porque no le van a dejar poner en marcha desarrollos urbanísticos en la ciudad. Se está perjudicando no solo a las empresas sino también a los sectores de servicios, de hostelería, de transporte, al comercio... Se les están hurtando las posibilidades económicas de desarrollarse. Todos los datos que da Ascega sobre las licencias no son refutables y muchos los da el propio gobierno municipal que no se destaca precisamente por su transparencia, al contrario: intenta poner todo tipo de trabas para que no se conozcan esos datos.

-¿Cuánto está tardando la concesión de una licencia de obras?

-Alguna un año y seis meses. Cuando decían que habían concedido 700 licencias resulta que sale a una por día, cuando un técnico municipal informa cinco licencias al día y hay varios técnicos. Hay algo que falla pero de tanto decirlo ya cansa; son datos que damos y nunca se rebaten. Se criminaliza a los empresarios y a todos aquellos que lo que hacen es crear empleo, crear riqueza e intentar vivir. Antes nos decían a nosotros, a Ascega, que éramos los únicos cabreados, pero ahora son todos y los datos de Apecco son demoledores. Hablan de la ejecución del presupuesto y resulta que para hacer una pista en la Comandancia de Obras hay dinero, pero para el plan de conservación de los barrios no; para arreglar la cubierta de la cárcel hay dinero, pero para la conservación de la cubierta de Riazor no...

-¿Y dónde considera que está la solución para todo esto que cuestionan?

-Este gobierno municipal tiene un grave problema con la libertad individual: o tragas con lo que dicen o la llevas clara; lo que plantean es que si no piensas como yo eres mi enemigo. En Ascega ya hemos renunciado al convenio de colaboración con el Ayuntamiento porque no queremos que nos echen nada en cara. Nosotros no vamos a bajar la rodilla.

«Las reuniones con el Ayuntamiento han servido para ver una carencia total de ideas»

«Ascega no quiere perder el tiempo en la crítica destructiva y por ello realiza estas propuestas que pretende que esta ciudad salga de la parálisis en la que se encuentra». Esto afirmaban los responsables de Ascega a finales del año pasado cuando entregaron en el Ayuntamiento un decálogo con medidas para reactivar económicamente la ciudad.

-Ustedes han tenido algunas reuniones con el Ayuntamiento, ¿han servido para algo?

-Han servido para ver una carencia total de ideas y de capacidad de gestión; se nos ha dicho que las únicas ideas válidas son las que tienen ellos y parece que todo el mundo está equivocado o en su contra. A su alrededor han hecho un círculo de comisarios políticos y todo lo que no sea lo que ellos dicen es problemático. Nosotros nos tememos que aunque ellos dicen que no quieren que se judicialice la gestión se va a judicializar. No es cierto eso que dicen de que antes esto era una república bananera para los empresarios y que por eso había denuncias. Me parece que hay tres casos de empresarios que llegaron al juzgado. Están haciendo afirmaciones demagógicas frente a nuestros datos que son muy testarudos, por ejemplo: Han concedido una renta social.

-¿Creen que está mejorando la situación económica?

-En nuestro entorno detectamos indicios de mejoras, pero no en la ciudad porque la están llevando a la inanición, están dejando que se muera sola. El comercio sigue destruyendo empleo y oportunidades de empleo. Te convierten la licencia de obra menor en obra mayor y tenemos casos en los que tardaron un año y seis meses en obtener la apertura de un negocio. Tenemos varios casos de estos. Nosotros tenemos clarísimo nuestro derecho, y el deber, a trabajar y dar trabajo.

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