Aplican la atenuante de intoxicación etílica a una mujer que conducía al borde del coma

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

La procesada ya fue condenada en cuatro ocasiones por circular sin carné y en estado ebrio

23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La del 3 de octubre del año pasado no era la primera vez que la policía o Tráfico sorprendía en estado ebrio a esta mujer de 45 años y de nacionalidad colombiana. Entre el 2011 y el 2013 fue denunciada hasta en cuatro ocasiones por circular con sus facultades mermadas por consumo de alcohol o por tener el carné retirado.

Sin licencia de conducir por una sentencia que se lo impedía, la volvieron a parar sobre las tres de la madrugada del 3 de octubre del 2015. La mujer, según la sentencia, conducía su coche «después de haber ingerido varias bebidas alcohólicas que disminuían de forma apreciable sus facultades de atención y reflejos, así como la capacidad para el control y manejo de los mandos del vehículo». Como consecuencia de su estado, perdió el control de su turismo, se salió de la vía y colisionó contra un árbol.

Al lugar del accidente se desplazó la Policía Local y observaron que la conductora presentaba «claros síntomas de embriaguez». La sometieron al test de alcoholemia y arrojó un resultado de 1,4 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Una tasa en la que la mayoría de las personas estaría en coma etílico.

La mujer fue juzgada por estos hechos en la sala de lo Penal número 5. Reconoció los hechos después de que su abogado alcanzase un acuerdo con la Fiscalía. Por el delito contra la seguridad del tráfico por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas se le condenó a cinco meses de prisión, concurriendo el agravante de reincidencia. En cuanto al delito de conducción sin permiso, se le aplica la eximente incompleta de intoxicación etílica. No lo decidió ni el juez ni el fiscal, sino que lo dice la ley, que ampara a los que se ponen al volante sin licencia o con el carné retirado cuando lo hacen en estado ebrio.

Esta vez, el juez le impuso a la procesada, aparte de los cinco meses de prisión -no ingresará por ser la pena menor a los dos años- la prohibición de sentarse al volante durante los próximos tres años.