El cocido se come a la caldeirada

Emiliano Mouzo A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Las pescantinas dicen que en estas fechas los clientes les abandonan para irse a las carnicerías y a las tiendas de verduras

11 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Faltan dieciocho días para el martes de carnaval, la jornada grande de esta popular celebración. Pero la proximidad de estas fiestas ya se deja notar en las plazas y en los mercados.

A algunos comerciantes les desborda la alegría, característica principal del entroido, y otros no se ríen tanto. El motivo es que durante estas jornadas, y hasta bien entrado marzo, la carne, sobre todo la de cerdo, se come al pescado y al marisco.

Los profesionales que ofrecen al público los productos del mar se quejan «de la huida» de sus clientes hacia las carnicerías y las tiendas de verduras. Una vista rápida por las plazas basta para comprobar que el área de pescadería está muy sola. «Y triste», apuntilla Chelo Hermida, representante del mercado de Lugo. De la misma forma se lamentan en los supermercados.

Las pescantinas aseguran que las escasez de clientes «se da todos los años por estas fechas», hasta el punto de que algunas «optan por no bajar al muelle a comprar pescado y dedican esta temporada a descansar». Y así es, porque en casi todas las plazas hay varios puestos vacíos. Chelo cuenta que este año la situación es peor, «porque hicieron mucho daño los temporales en el mar. La gente cree que no hay pescado, y no es así, todos los días tenemos mercancía y, como siempre, de la mejor calidad y con precios asequibles a todos los bolsillos».

Mientras, en las carnicerías se frotan las manos. Y lo mismo hacen en las tiendas de verduras. «Nestas datas a xente ven máis por aquí», cuenta Isabel, de Carnicerías Becerra. Explica que a pesar de la proximidad de los carnavales, «os prezos continúan sendo os mesmos que noutras datas», subraya Raquel, trabajadora de una tienda en Elviña.

Además, «un quilo de carne dá moito que comer, reparte moito», indica Isabel. Asegura que con tres kilos de carne y un chorizo «faise un bo cocido e non chegaría aos corenta euros. Ollo, hai que poñerlle unhas boas pataquiñas, garavanzos e uns grelos. Aínda así o prezo non aumentaría moito», subraya la mujer.

Grelos de Monfero

Ana, una frutera de la plaza de Lugo, reafirma las palabras de Isabel. «Ten razón. Temos grelos de Monfero marabillosos a 1,75 euros o quilo, e o que pode subir un pouco son as patacas de Carballo, a 1,75, pero un día é un día».

Pero falta algo en el menú del carnaval: «Non hai un bo cocido sen orellas, a un euro cada unha, e filloas, a 0,80», manifiesta Feli, desde su tienda delicatesen de la avenida de Oza, antes General Sanjurjo.