Diego García-Muñoz, un humanista con el que hablar sobre cualquier cosa de la vida

La Voz

A CORUÑA

Diego García-Muñoz Vaquero, arquitecto y ajedrecista
Diego García-Muñoz Vaquero, arquitecto y ajedrecista CEDIDA

Fue fundador del Club de Iniciativas Deportivas de la Universidade

28 jun 2016 . Actualizado a las 17:42 h.

En poco más de un mes han fallecido dos ajedrecistas internacionalmente conocidos; Korchnoi y Pomar. Sin embargo, para nosotros este 2016 será el triste año en que perdimos de manera prematura a uno de nuestros mejores jugadores que, además de fundador, era el vicepresidente que ideaba el futuro del club a largo plazo. Su sosiego y equilibrio fueron claves para que una entidad creada por estudiantes universitarios en el año 1994 perdure hoy como uno de los clubes más conocidos de Galicia. Diego fue un habitual de los torneos desde niño, en aquellas masivas pruebas de Reyes celebradas en Riazor. Jugó en el Deportivo, cuando este club aún mantenía todas sus secciones deportivas y en la destartalada sala de ajedrez del Estadio destacó en la competición federada por equipos, la modalidad que prefirió sobre los torneos individuales.

Al entrar en la Universidade se convirtió en uno de los primeros ajedrecistas de la recién creada institución y ya en 1994, poco antes de cumplir veintidós años, fue uno de los fundadores del Club de Iniciativas Deportivas Universitarias, ocupando diferentes cargos. Como jugador lo echaremos de menos, por su nivel y disponibilidad, pero sin duda el mayor vacío nos lo deja en lo que nos aportaba su carácter, sus múltiples saberes y aficiones, que lo convertían en un humanista con el que debatir sobre cualquier aspecto de la vida. A principios de este mes se quejaba del estrés motivado por su trabajo y el doctorado en arquitectura. Aún así encontraba tiempo, como en el pasado Día del Deporte en la Calle, para hablar de las categorías inferiores del club, preocupado siempre por la ética y los valores que debíamos transmitir.

Cuando hace unos meses falleció David Bowie escribió que la oleada de afecto y admiración hacia el artista ponía en evidencia que el ser humano necesita asirse al lado más libre y creativo de la vida, que la belleza es el camino frente a tanta mala noticia, dolor y mezquindad. Así era él. Como ha escrito su hermana: fuente de inspiración, un inagotable buscador de belleza, un soñador.

En uno de sus posts señalaba que «hay un mecanismo humano que siempre que lo observo me toca la fibra sensible, me conmueve indefectiblemente. Es sencillo, se trata de ver a alguien sobreponerse a una circunstancia adversa, luchar a contracorriente pero con toda la convicción». Aquel texto, que iba dirigido a otras personas pero parece hoy destinado a la familia, a la que acompañamos, finalizaba así: «Algunas de las que me leéis ahora necesitaréis sacar esa capacidad de superación y coraje en las próximas semanas, así que va por vosotras».

Gracias por todo lo que nos diste, amigo.

Club de Iniciativas Deportivas Universitarias.

www.xadrezuniversitario.org