El gobierno local se reunirá con responsables del IGVS el próximo día 8
29 ago 2015 . Actualizado a las 09:02 h.«Igual esas vivendas estarían mellor xestionadas dende o Concello», dijo ayer el alcalde en referencia al edificio de Novo Mesoiro en el que se suceden actos vandálicos y robos desde hace más de un lustro. El regidor señaló que el próximo día 8 los concejales de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, y Servizos Sociais, Silvia Cameán, se entrevistarán con responsables del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), responsable de las viviendas públicas del inmueble, situado en la calle Ribeira Sacra.
El alcalde abrió así la puerta a solicitar la titularidad de las viviendas a ese organismo dependiente de la Xunta, en un momento en el que se ha producido un repunte de los actos vandálicos y de las entradas por la fuerza en pisos vacíos para ocuparlos.
El IGVS reconoce que se han producido varios asaltos en las últimas semanas y que dos viviendas llevan ya tiempo ocupadas por residentes irregulares, que la policía vincula con el antiguo poblado de Penamoa.
El instituto afirma que ya ha puesto en marcha los mecanismos legales para expulsarles de las viviendas y no descarta emprender acciones penales contra algunos de ellos, aunque también ha señalado que acudirá a los Servicios Sociales del Ayuntamiento si alguno de ellos están en situación de desamparo.
El alcalde reconoció ayer que existe un problema de seguridad ciudadana en las viviendas, en las que se han llegado a denunciar robos de ruedas de coches, cables o diverso mobiliario de las viviendas y los locales vacíos.
Añadió que su gobierno está a disposición de la subdelegación de Gobierno y de la Policía Nacional para colaborar en todo lo necesario a la hora de afrontar los problemas de convivencia. También explicó que la Policía Local mantiene en la zona los mismos efectivos que tenía antes de que este agosto volvieran a dispararse las incidencias en el edificio.
Antes del verano el inmueble vivió un período de calma relativa después de que el Ayuntamiento organizase a finales del año pasado un encuentro entre los vecinos y representantes de la Policía Nacional, que reforzaron su presencia en el barrio.
Pero el problema siguió latente y volvió a estallar este mes, como ocurre desde hace más de un lustro. Tanto fuentes de la policía como el PP relacionan los problemas de convivencia con la disolución del poblado de Penamoa. Los conservadores entienden que no se tomaron las medidas necesarias para lograr la integración de los residentes más conflictivos de ese poblado cuando fueron dispersados. El PSOE recordó que durante los últimos cuatro años pidió de forma reiterada que se tomasen medidas para resolver los problemas de convivencia, que siguen ahí.