Donde todas las capacidades caben

maría ballesteros OLEIROS / LA VOZ

A CORUÑA

Dos niños juegan en la orilla durante la actividad en Bastiagueiro.
Dos niños juegan en la orilla durante la actividad en Bastiagueiro.

Santa Cruz acoge un campamento urbano para niños con y sin discapacidad

26 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

«Cada niño es un mundo. Y estos tienen unas necesidades distintas, ni mejores ni peores». Es la manera en que el promotor de los campamentos urbanos del albergue de La Merced, en Santa Cruz, Nacho Rama, explica por qué en sus actividades caben todos los menores, sean cuales sean sus capacidades. Por eso entre los cerca de 250 participantes en estos programas de ocio veraniegos, hay niños que tienen más dificultades para moverse, para ver u oír o para jugar al fútbol, hacer escalada o practicar bodyboard.

Integrar a todos los chavales, de entre 3 y 18 años, está lejos de ser una tarea fácil, según reconoce el equipo que trabaja con ellos día a día, desde las 9.30 horas a las 17.30, porque los miedos ante situaciones nuevas afloran en todos los niños, tengan o no discapacidad. «Hay niños que pueden tener miedo porque no saben cómo comportarse, pero a medida que hacen las actividades se ve el cambio», explica Alba Pico, una de las monitoras especializadas. «No es fácil, pero para eso estamos nosotras», añade su compañera Eva Cividanes.

Por eso en el campamento, que imparte Deporgestión en colaboración con la Fundación Abrente, todos los niños hacen de todo. «Partimos de la base de que todos pueden hacer casi cualquier actividad, y si no es posible se modifica», señala el guía de monitores Adrián Río.

Una educadora social y una psicopedagoga facilitan la integración

La Fundación Abrente colabora desde hace tres años con la empresa que gestiona el albergue de La Merced para facilitar la integración de los niños con discapacidad en los campamentos urbanos de Santa Cruz. En la actualidad siete niños que presentan alguna necesidad especial participan en estos programas, que se desarrollan por quincenas durante todo el verano, y cuentan con un equipo de cinco personas que los atienden en exclusiva, entre las que se incluyen una psicopedagoga y una educadora social.

Para facilitar aun más la compresión de la realidad de la discapacidad entre los menores, en esta edición de los campamentos se incluye una jornada dedicada a los deportes adaptados en la que los participantes reciben una pequeña charla de sensibilización y participan en actividades usando sillas de ruedas, vendas en los ojos y elementos similares para entender mejor a los niños con más dificultades.