Una niña de 7 años que llevó a su madre al banquillo por agresión reconoce que mintió

Fueron cientos de veces las que esta madre llamó en los dos últimos años a las puertas de la Justicia y de la Xunta para pedir que la creyeran y así recuperar la custodia de su niña. Buscaba convencer a las autoridades de que jamás había pegado a su hija de 7 años, que lo que les había contado la menor no eran más que fábulas de una cría que siempre «quiere llamar la atención». Pero no le hicieron caso porque había pruebas que decían lo contrario. Como que a esta madre ya le habían retirado la tutela de dos de sus hijos un mes antes de los hechos «por situación de desamparo». Y, sobre todo, porque la niña apareció en el centro de menores que se había hecho cargo de ella con lesiones y contando que se las había producido su madre con una escoba y un cinturón. Explicó a su profesora que después de pegarle, le dijo que ya no era su madre y que dormiría en las escaleras. Esto ocurrió en enero del 2013 y al día siguiente la Xunta se hizo con la custodia de la menor y se inició un proceso judicial en el que imputaron a la madre por dos delitos de maltrato familiar por los que la Fiscalía pedía que fuese condenada a año y medio de prisión.

Juicio

Y así se llegó al juicio, que se celebró hace tres semanas en el Juzgado de lo Penal número 5. La primera en declarar fue la procesada. Y dijo lo que ya llevaba diciendo desde hacía más de dos años, que todo aquello había sido una invención de su hija. No quiso que el caso quedara visto para sentencia sin antes hacerle ver a la jueza que lo «único» que quiere en esta vida es que su pequeña «regrese a casa para siempre».

Sobre las lesiones que presentaba su hija, juró que no sabía cómo se podían haber producido, si bien puntualizó que el sangrado por la nariz con el que llegó la cría al centro de menores era producto de la epistaxis que padece. Preguntada por las razones que pudieron llevar a su hija a inventarse algo tan grave, su madre describió a su hija como alguien a la que le gusta llamar mucho la atención. Y su abogado, Miguel Ángel Jopia, recordó incluso la ocasión en la que mintió en el centro de menores sobre un caso de abusos sexuales. Luego entró la niña en la sala y lo primero que dijo es que todo lo que había contado era una mentira, que se arrepentía mucho.

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