Perillo recupera sus pasos de peatones

m. ballesteros OLEIROS / LA VOZ

A CORUÑA

CESAR QUIAN

La Diputación ejecutó ayer el repintado del firme en la intersección de la N-VI con Areal

15 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los pasos de peatones invisibles que los vecinos de Perillo sufrían en los últimos tiempos han comenzado a recuperar el color. Operarios de la Diputación iniciaron ayer los trabajos de repintado de las zonas de preferencia peatonal a la altura de la intersección entre la Nacional-VI y la rúa do Areal, donde la señalización horizontal había sufrido un importante deterioro.

La actuación forma parte del Plan de Conservación de Vías Provinciales, que prevé una partida conjunta de 400.300 euros para mejoras en las carreteras de los municipios de Sada y Oleiros, donde el alcalde, Ángel García Seoane, ha denunciado de forma reiterado el mal estado en el que se encuentran buena parte de las vías tanto de titularidad autonómica como provincial.

En la calle donde la Diputación inició ayer los trabajos, que da acceso a la avenida Emilia Pardo Bazán y soporta un importante tráfico, el proyecto prevé también realizar mejoras en el firme, que se encuentra también muy deteriorado, y desbroces en aquellos puntos en que sea necesario. En los últimos meses, la Diputación también ha llevado a cabo trabajos de mejora en la parroquia de Oleiros, con el repintado de la señalización horizontal. A raíz de estas obras, el alcalde oleirense puso el foco en el mal estado de los pasos existentes a la entrada del municipio, donde se ubica el colegio de A Rabadeira. García Seoane reclamó coordinación entre la administración provincial y la autonómica, ya que la titularidad de este tramo pertenece a la Xunta, pero los pasos en este punto continúan sin pintar.

Compromiso incumplido

La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas aseguró el pasado mes que la mejora de estas zonas de paso se ejecutaría antes de que acabase el año. Los técnicos esperaban que hubiese un par de días seguidos sin lluvias para ejecutar los trabajos, pero lo cierto es que pasadas las lluvias y tras semanas de estabilidad meteorológica cruzar ante el colegio de Oleiros, donde el paso de peatones está literalmente borrado, y a la salida de esa misma rotonda continúa siendo un grave riesgo para los viandantes, ya que la pintura resulta imposible de percibir por los conductores, sobre todo con poca visibilidad.