Cinco años de internamiento por intentar quemar su casa y a su mujer

Ana Lorenzo Fernández
ANA LORENZO BERGONDO / LA VOZ

A CORUÑA

CESAR QUIAN

Los psiquiatras valorarán si pasará la condena en prisión o en un centro

20 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

De la pena de doce años que solicitaba el fiscal por un delito de asesinato en grado de tentativa, finalmente se quedará solo en cinco de internamiento, que podría ser en prisión o en un centro psiquiátrico, una decisión que corresponderá a los especialistas en salud mental. Esto es parte del acuerdo al que llegaron ayer la abogada de la acusación particular y el del vecino de Bergondo acusado de intentar quemar su casa con su mujer dentro. El imputado deberá abonar a la víctima 75.000 euros de indemnización, de los que ya ha recibido 40.000, y además tendrá que permanecer alejado de ella y de sus hijos durante un período de diez años.

Manuel Ferreiro, abogado del acusado, explicó ayer que «se va a valorar el estado mental actual del acusado, y será la sala la que decida cuál será su destino, si la prisión o un centro adecuado. Por el acuerdo, se permite su internamiento en un centro adecuado, y serán los psiquiatras de la seguridad social los que decidan cuál va a ser su destino y se lo comunicarán a la sala». Apuntó que este fue el primer conflicto que tuvo la pareja, ya que el imputado «nunca protagonizó incidentes violentos con anterioridad, fueron todos intentos de suicidio con ingesta de medicamentos. Esta vez fue la primera vez en la que hizo algo más, en la que prendió fuego a la vivienda».

Por su parte, la abogada de la acusación particular, María José Casal, se mostró conforme con el acuerdo alcanzado ayer en la Audiencia, aunque dijo que no resarce los hechos cometidos. En este sentido, recordó que el caso por el que se juzgó al vecino de Bergondo «fue una tentativa de asesinato, y no se paga con dinero el daño causado. Evidentemente, tampoco se paga con una privación de libertad demasiado larga o demasiado excesiva, pero realmente hoy, la víctima puede cerrar página a lo que vivió en octubre del 2011. Eso ya es una victoria para todo, para la víctima y para el acusado».