La comarca da calambre

toni Silva A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Tres ejemplos en Miño: farola cubierta de forma provisional por la Policía Local, otra muy próxima con cables al descubierto y una tercera en la playa con cinta aislante.
Tres ejemplos en Miño: farola cubierta de forma provisional por la Policía Local, otra muy próxima con cables al descubierto y una tercera en la playa con cinta aislante. C. Delgado< / span>

La menor electrocutada de Brión no ha hecho reaccionar a algunos concellos

19 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta semana se ha cumplido un mes de la muerte de una niña de Brión de 14 años cuando disfrutaba de las fiestas de Guadalupe en el compostelano barrio de Vite. La joven sufrió una descarga al tocar una valla metálica junto con una farola en estado defectuoso. El trágico accidente desató las alarmas no solo en Santiago sino en toda Galicia. Pero un repaso a las instalaciones eléctricas de la comarca coruñesa desvela que el cuidado de estas estructuras no se realiza con todo el celo recomendado. En numerosos puntos del área metropolitana hay un potencial peligro por el estado de algunas farolas y cuadros eléctricos. Periódicamente este tipo de instalaciones en mal estado asoma en los ruegos y preguntas de los plenos, pero todo parece insuficiente para mantener en perfecto estado la totalidad de los elementos.

«Un simple accidente de tráfico puede dejar una situación de peligro en una farola». Lo dice Javier Varela, jefe del gabinete técnico del Ayuntamiento de Culleredo. «En nuestro municipio, y me consta que en la gran mayoría, se realiza una inspección a fondo e integral cada tres meses», explica el técnico. «Pero además siempre hay una revisión diaria y otra nocturna, en ambos casos preventivo y conductivo, y otro correctivo. En el primero se revisan los soportes, líneas, controles de encendido y apagado, y hay también un servicio permanente de guardia».

Varela recalca que en este tipo de servicio es fundamental la participación ciudadana. «Tenemos un teléfono donde los usuarios nos pueden dar aviso de una farola que genere peligro, en esos casos actuamos de inmediato», explica este técnico que también dirige el área de Medio Ambiente, Servicio e Infraestructuras. Pero insiste: «Cualquier acto en la vía pública puede alterar este tipo de instalaciones, ya no digamos el claro caso del robo de cables, cuando dejan otros colgando y generan una situación muy peligrosa».

Además de las instalaciones en mal estado, también llaman la atención los parches rudimentarios con que se solventan en muchos casos. La cinta aislante abunda en numerosas farolas, bien para sostener la tapa que cubre los cables o incluso para cubrir ese hueco cuando no hay tal cobertura. Se asumen como «reparaciones de emergencia», pero en algunos casos llevan meses.