La artista de Fonteculler prepara su primer disco en solitario y adelanta que el videoclip de lanzamiento se grabará en Culleredo
03 oct 2014 . Actualizado a las 21:29 h.[maría ballesteros]
pesar de la fábula, Lydia Botana (Fonteculler, 1984) se confiesa más hormiga que cigarra y asegura que ha sacado adelante su carrera a base de tesón. Tras un año y medio con su proyecto de música infantil De aquí para alá, del que prepara un libro-cedé, trabaja también ahora en su primer disco en solitario, Bolboreta. El videoclip de lanzamiento se grabará en Culleredo.
-¿Por qué la música?
-Gracias a mi padre que es músico, me metí en el conservatorio con seis años, donde hice toda la carrera de piano. Él al volver de la emigración, en Londres, se dedicó a las orquestas. Por eso yo compaginaba el mundo clásico del conservatorio con tocar con él en casa a los Beatles, canciones de Fuxan os Ventos? Así tuve una formación por los dos lados.
-¿Cómo ha conseguido vivir de esto?
-Mi padre lo arriesgó todo para dedicarse a lo que más le gustaba y siempre con la frase: «Prefiero ser millonario en tiempo que en dinero». Yo fui sacrificando tiempo de estar con los amigos o de fiesta, para estudiar y preparar bien la carrera musical. Es sacrificado, pero ahora me siento súper afortunada en mi profesión.
-¿Y cómo va ese disco?
-Lo estamos grabando entre Barcelona y A Coruña y lo está produciendo Gambeat, el bajista de Manu Chao. Es mi punto de vista de las cosas que me pasan acompañado de la música que me sale.
-¿Qué estilo?
-Muy variado: desde reggae a rock, medio bossa nova, jazz, un poco pop, músicas del mundo... Hay también versos de Celso Emilio Ferreiro, al que amo. Y lo estoy grabando sola porque soy de la escuela del yo me lo guiso, yo me lo como. Grabo todos los instrumentos, aunque con alguna colaboración puntual con gente con la que para mí es un honor grabar.
-¿Con quién le gustaría llegar a colaborar?
-A mi edad he tocado o estado en contacto con las personas que más admiro en el mundo. Mi padre es músico porque en la tele veía a los Beatles. Por eso cogió las maletas y se fue a Londres. Yo conecté con ese mundo cuando Paul McCartney me invitó a su universidad, en Liverpool, cuando me licencié y le mandé audios y vídeos. Es un centro increíble.
-¿Y además de McCartney?
-Fuera del clásico, mi artista de referencia es Manu Chao y conseguí colaborar y tocar con él en un concierto para 30 personas en un barcito. Para mí también fue increíble. Además mi banda favorita desde los 16 es Incubus. Tuve la suerte de conocerlos con Red Hot Chilli Pipers en el escenario, en Madrid hace dos años. Esas metas, aunque no me lo crea, ya las he conseguido, por eso no tengo ese fetichismo...
-¿Qué le recomendaría a quien quiere dedicarse a la música?
-El día que hice el concierto para los alumnos del conservatorio de Culleredo, donde estudié, lo dije: que persigan sus sueños, que si realmente algo es su pasión, es a lo que tienen que dedicarle el tiempo. Puede que haya gente a la que le tocan con una varita, pero yo soy un ejemplo de tesón, la hormiguita que está trabajando siempre. Miro atrás y digo: todo lo que he conseguido... pero todo lo que he trabajado también.
A
Lydia Botana
Pedagoga musical e instrumentista
Lydia Botana es profesora y toca muchos instrumentos.
«Yo grabo todos los instrumentos. Soy de la escuela del yo me lo guiso, yo me lo como»
«Recomiendo a los estudiantes que dediquen el tiempo a lo que es su pasión»