Los arqueólogos tienen grandes esperanzas puestas en el conocido como fuerte de Valparaíso, en el parque de Eirís. Al igual que ocurrió con otras excavaciones llevadas a cabo en la ciudad, la primera y principal tarea en este enclave ha sido la de limpieza, primero de la maleza, que cubría prácticamente todos estos restos, y luego de todos los escombros que en los últimos años se habían ido acumulando en la fortaleza.
Después de la limpieza llevada a cabo, la siguiente intervención de los arqueólogos permitirá a los mismos ir datando exactamente estos restos que podrían haber formado parte en su día de un sistema defensivo de la ciudad que incluiría también el castillo de Oza.
Sin embargo, los arqueólogos apuntan que en su momento se encontraron algunos restos romanos en esta zona de Eirís, por lo que esta construcción podría estar ubicada también sobre una base romana. Es lo que tratan de comprobar puesto que, de ser así, incrementaría notablemente la importancia de unos restos que en su día quedarán integrados en el parque de Eirís.
Y es que este yacimiento arqueológico está en proceso de pasar de ser un lugar considerado peligroso (en la limpieza han aparecido decenas de jeringuillas) a un sitio atractivo para vecinos y usuarios del parque. Además del interés histórico que tiene Valparaíso, las vistas sobre la ría son espectaculares y los responsables de las excavaciones consideran que este podría convertirse en un punto de gran interés turístico.