Igual que ocurrió en el caso de RAS, denunciará sus acciones a la Fiscalía
04 abr 2014 . Actualizado a las 19:24 h.El número de grafiteros que actúan actualmente en A Coruña ronda, según el Ayuntamiento, la treintena. De ellos, la Policía Local tiene identificados a una docena de jóvenes. Se trata de casos en los que han cogido in fraganti a los autores de las pintadas, atribuyéndosele otras que responden a un mismo diseño, caligrafía y estilo. En base a ello, se pretende que la Justicia observe algo más que la sanción administrativa que le podría aplicar el Ayuntamiento. Al reunir varias pintadas, los actos se pueden calificar como un delito de daños continuado con consecuencias penales.
La denuncia del grafitero RAS, del que se han documentado 91 pintadas cuyos daños se estiman en 16.763 euros, ya está en poder de la Fiscalía de Menores. Como la mayoría de los que han sido identificados por la Policía Local, se trata de un menor de edad. Tiene 17 años y entra dentro del retrato tipo (chico entre 14 y 18 años) que maneja el 092. En las próximas semanas le sucederán las denuncias de otros grafiteros.
Esta labor la desarrolla una unidad específica de la Policía de Barrio. Se trata de la patrulla medioambiental, compuesta por cuatro agentes. Se dedican a fotografiar, clasificar y documentar las pintadas que aparecen en los muros de la ciudad. Una vez que un diseño se repite, pasa a formar parte de la lista de objetivos. A partir de ahí, todo depende de que, bien a través de una denuncia o bien a través de la vigilancia policial, se intercepte al autor en plena faena. Fue lo que ocurrió con RAS y los otros once chicos que engrosas la lista.
Asma y otras firmas famosas
Una de las intenciones del grafitero es la de bombardear la ciudad. Es decir, que su nombre se vea en el mayor número de lugares. Se valora el riesgo al hacerlo y la visibilidad. En ese sentido, el más famoso en la ciudad es Asma. Se trata de un joven de los Castros, de 26 años. La Policía Local lo sorprendió en la calle General Mola, en verano del 2012. A principios del 2013 lideraba el ránking de vándalos más perseguidos en la ciudad por ese motivo. Otras firmas célebres son las de Aliens, Sudor, Pufo, Sonche o Bune.
El Ayuntamiento gasta 600.000 euros al año a en combatir esta práctica. Las zonas en las que más pintadas aparecen son las de botellón y lugares de copas como el Orzán o la plaza de Santa Catalina. En barrios, destaca el caso de los Castros.
«Castigo ejemplar»
La asociación ecologista Arco Iris ha pedido medidas contundentes para el grafitero RAS. Piden que el gobierno local esté «a la altura de las circunstancias e imponga al vándalo un castigo ejemplar una vez que sea conocido el expediente abierto contra él». Tomando como referencia la ordenanza municipal vigente y separando las 91 pintadas, Arco Iris estima que la canción podría llegar a los 68.000 euros.