Detenido por intentar matar a su mujer y a sus suegros en Sada

Javier Becerra
Javier Becerra REDACCIÓN

A CORUÑA

Paco Rodríguez

Los persiguió con un cuchillo y, luego, se atrincheró en su casa prendiéndole fuego

31 mar 2014 . Actualizado a las 10:25 h.

Un hombre de 50 años intentó matar a su mujer a cuchilladas. La dejó herida, tanto a ella como a los padres de esta, que salieron en su auxilio. Además, prendió fuego a la casa familiar y casi hace lo mismo con la de un vecino, para luego darse a la fuga. El suceso ocurrió en el lugar de O Castelo, en la parroquia de Osedo en Sada, alrededor de las 22.30 horas. En la vivienda se originó una fuerte discusión familiar que derivó en una escena violencia doméstica.

Según fuentes de la Guardia Civil, el agresor se abalanzó sobre su esposa portando un cuchillo. Al intentar defenderse, ella sufrió diversos cortes en los brazos. Igual suerte corrieron sus suegros. La mujer, además, recibió varios golpes en el rostro.

Aunque la bronca arrancó dentro de la casa, terminó desplazándose fuera. La esposa del agresor y sus suegros se echaron a la calle atemorizados. Los vecinos, al ver tanta violencia, se enfrentaron a él. Su respuesta fue volver a la casa y retornar con una garrafa de gasolina. Quería incendiar la vivienda situada enfrente a la suya. Así roció con el líquido inflamable la fachada. Sin embargo, el vecino se enfrentó a él, y logró doblegarlo.

Ante esta situación, el protagonista del suceso se atrincheró en el garaje de su vivienda, en donde tenía más gasolina. Amenazó con prenderle fuego. Y cumplió su promesa. Al final, al ver las llamas, se escapó por la parte trasera y se echó a correr en dirección a Sada.

La Guardia Civil y la Policía Local de Sada acudieron y rastrearon la zona. Localizaron al hombre en unos jardines cercanos y lo detuvieron, acusado de un delito de homicidio, Hoy pasará a disposición judicial.

Al lugar también acudieron los Bomberos de Betanzos, que controlaron el fuego. El alcalde de Sada, Ernesto Anido, también se desplazó al lugar, lamentando lo sucedido y condenando los hechos.