«Acta de acuerdo sobre la transferencia de la fábrica de armas de A Coruña». Esto dice el encabezamiento del documento suscrito ayer por los trabajadores de la fábrica de armas y los responsables del Instituto de Formación Financiera y Económica, IFFE, de Oleiros. Roberto Teijido, portavoz de los trabajadores, dijo que «non podemos retrasar máis isto». David Carro, director de IFFE, apuntó que para la puesta en marcha de la fábrica «faltan unos flecos». Entre ellos la decisión de la Consellería de Economía e Industria.
Carro rechazó que el grupo tuviera cualquier tipo de interés especulativo en los terrenos y que la fórmula para utilizar los mismos sería un arrendamiento del Ministerio de Defensa.
La actividad, en noviembre
Teijido indicó que las previsiones recogidas en el documento son que se reanudará la actividad en la fábrica, de forma paulatina, en el mes de noviembre con la contratación de 31 de los trabajadores despedidos el 28 de junio. Antes del 31 de enero del próximo año la plantilla será de 64 empleados.
En cuanto a la actividad de la fábrica apuntó Carro que se orientará a lo que venía haciendo, con la elaboración de piezas de mecanizado especial, además de orientarla «hacia otros focos como el aeroespacial, la automoción, y para ello es necesario contar con el activo de los trabajadores».
Sobre si la firma del acuerdo era una manera de presionar a la Xunta, Teijido destacó el apoyo del alcalde, Carlos Negreira, mientas que «sendo do mesmo color político, a Xunta foi moi tibia, por non empregar outro cualificativo».
«No hay novedad». Esto indicaban desde la Consellería de Industria, insistiendo en los argumentos del conselleiro del pasado viernes en A Coruña de la necesidad de contar con un proyecto con viabilidad financiera y que garantice el empleo.