«No juego al ajedrez para ganar partidas sin importancia»

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

A CORUÑA

Iván Salgado, es una historia de precocidad en un ámbito tan competitivo como el ajedrez

16 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La de Iván Salgado López (Ourense, 1991) es una historia de precocidad en un ámbito tan competitivo como es el del ajedrez. Aun así, tras alcanzar la consideración de gran maestro, con solo 16 años continúa derribando barreras, incluida la del reciente campeonato nacional, conquistado en Linares. Allí sigue compitiendo con su club, el Sestao, en busca del título por equipos.

-¿Cómo asimiló su victoria en el Campeonato de España absoluto?

-Pues la verdad es que no le doy demasiada importancia, ha sido una consecuencia lógica al trabajo de los últimos años. Siempre es bonito ganar un campeonato de España absoluto, pero ya está. Se ganó y ahora hay que seguir haciendo cosas.

-Vino acompañado de su triunfo en la partida contra toda una leyenda del ajedrez nacional como Miguel Illescas

-Es uno de esos momentos en los que entiendes por qué juegas al ajedrez. No juego al ajedrez para ganar partidas sin importancia, sino para estar a tope a la hora de marcar la diferencia, y la partida contra Miguel Illescas era uno de esos momentos. Fue un extra para mi trayectoria, pero lo único que hará que mi carrera ajedrecística evolucione positivamente es mi determinación para llegar a lo más alto en los próximos años.

-¿A qué edad comenzó a pensar en el ajedrez como una vía profesional?

-Con 18 años lo tuve bastante claro ya. Me gusta jugar al ajedrez, me gusta competir y puedo llevar la vida que me gusta, no puedo pedir mucho más, la verdad. Tienes que tener un mínimo de capacidad para llegar a un buen nivel, pero, una vez que tienes ese mínimo, la motivación y el trabajo marcan la diferencia. Así me lo he planteado siempre.

-¿Cómo evalúa el nivel actual del ajedrez gallego?

-El nivel medio está creciendo cada vez más, hay más chicos que juegan al ajedrez. Sin embargo, los mejores chicos de hoy en día están lejos de los resultados que conseguíamos los mejores gallegos hace apenas unos años. Supongo que uno de los motivos es que los chicos tienen más distracciones y les cuesta centrarse en una sola cosa.

-¿Por qué se decidió por enrolarse en las filas del Sestao?

-Desde que tenía 16 años me habían querido fichar, pero mientras había un equipo gallego en División de Honor como el Marcote, decidí que debía seguir jugando en Galicia. Ahora que no hay ninguno, consideré que había llegado el momento, porque pienso que para mantenerme al mejor nivel posible, debo luchar en las competiciones más fuertes todo el tiempo.

-¿Es muy distinta su vida a la de otros chicos de su edad?

-En mi caso viajaba mucho, trabajaba mucho y no tenía tanto tiempo para quedar con mis amigos como el que tenían ellos. Sin embargo, hice lo que me gustaba en cada momento, así que me alegro de haber vivido así.

-¿Qué le empuja a seguir planteándose retos más exigentes cada año?

-Hambre de todo en la vida. Cada día de mi vida, ahora más que nunca, lo vivo con ganas de mejorar en cada aspecto de mi vida, de hacer las cosas cada día un poco mejor y disfrutar al máximo de ellas. El ajedrez es una lucha sin cuartel entre dos personas, siempre he sido muy competitivo y he tenido muchas ganas de aprender. Supongo que el ajedrez era un medio perfecto para canalizar esa energía y ese deseo de competición.