Un carril-bici para Alfonso Molina... en 1958

R. García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

01 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

«Disponer que por la Sección Técnica de Obras y también con carácter urgente sea redactado un proyecto para la construcción de una pista lateral, de tres metros de ancho y de hormigón, en la Avenida de Lavedra, para la circulación exclusiva de bicicletas». Fue uno de los acuerdos tomados en la reunión ordinaria de la Comisión Municipal Permanente del Ayuntamiento de A Coruña. No fue el único de aquella sesión relacionado con la avenida de Alfonso Molina, ya que otro establecía: «Reiterar de los técnicos municipales que, con carácter urgente, presenten a aprobación de la Corporación las bases del concurso que se convocará entre todos los arquitectos españoles para la redacción de un proyecto de ordenación de fachadas en la Avenida de Lavedra, como complemento de la ordenanza aprobada».

Los acuerdos fueron tomados en marzo de 1958 y en los mismos se establecía que en la habilitación del carril lateral para bicicletas se tuviera en cuenta «la adopción de medidas de vigilancia necesarias para una mayor seguridad y evitación de peligros mediante la ordenación del tránsito de ciclistas y peatones por dicha avenida».

Han pasado casi 55 años desde entonces sin que el «carácter urgente» de las decisiones parezca haber tenido mucho éxito. De todos modos, sigue plenamente vigente la necesidad de ampliar en un carril dicha avenida, aunque ahora ya para el uso de los vehículos que con cierta frecuencia colapsan la entrada o la salida de la ciudad. De hecho, expertos como Carlos Nárdiz han destacado reiteradamente que el número de vehículos que entran a diario en A Coruña por Alfonso Molina es casi el doble del previsto cuando se construyó.

Y es que en la misma sesión de la Comisión Permanente de marzo de 1958, los asistentes acordaron «enterarse de la carta del director general de Carreteras y Caminos Vecinales, por la que se hace constar que se encuentra en marcha la subasta de las obras de acceso a La Coruña, desde Palavea al Puente del Pasaje».

La preocupación por la seguridad de los ciclistas no solo se plasmaba en las mencionadas medidas de vigilancia que pedían los responsables municipales, sino que acordaron asimismo «pasar a informe de la ponencia respectiva la oferta presentada para la edición de un folleto en colores sobre normas a observar en la circulación de motos y bicicletas».