Continúa el apoyo social para impedir el desahucio de Aurelia Rey en A Coruña

Javier Becerra
Javier Becerra A CORUÑA

A CORUÑA

Cesar Quian

Ayer la anciana de 85 años rechazó dos pisos de alquiler social. Solicita que le concedan una vivienda en una zona cerca de su vivienda, mientras Stop Desahucios pide que se levante la orden de desalojo para seguir negociando

20 feb 2013 . Actualizado a las 21:42 h.

Aurelia Rey cuenta un día más con el apoyo de la ciudadanía. Se trata un grupo menor que el de días anteriores, en los que llegaron a concentrarse unas trescientas. Pero siguen ahí, firmes en la defensa de la postura de la anciana. Desde primera hora de la mañana, el número 9 de Padre Feijoo cuenta con una presencia fluctuante de personas. En su momento álgido llegaron a las 200 personas. Tratan de impedir, una vez más, el desalojo de esta mujer de 85 años sobre la que pesa una orden de desahucio por el impago de un mes de alquiler.

En principio, por la mañana el caso avanzaba en la línea de lograr una solución favorable para ambas partes. La Xunta, en colaboración con los Servicios Sociales del Ayuntamiento de A Coruña trabajan desde el lunes en la búsqueda de una vivienda de alquiler social para la mujer, después de que haya rechazado irse a una residencia. Ayer rechazó dos pisos en los barrios de Novo Mesoiro y Eirís alegando la falta de arraigo en la zona.

Sin embargo, por la tarde la plataforma Stop Desahucios leyó un comunicado en el que sentenciaban de manera tajante su postura: «Sen suspensión definitiva da orde de desfiuzamento non haberá negociación de ningún tipo». Los activistas consideran que esa negociación debe hacerse de igual a igual y, con esa orden pendiente, la inquilina no se encuentra en el mismo plano. Además, han salido al paso de las opiniones que ponen en duda su salud mental, algo que tacharon como una «extratexia ca que tratan de desprsticiala».Todo con una intención: «Poñer en entredito o seu lexítimo dereito a vivir na súa casa, e tentar romper o importantísimo apoio social que está a ter pola cidadanía».

Por la mañana, Aurelia Rey reiteraba su petición de que le concedan un piso en el centro de la ciudad. Así lo ha expresaba en la puerta de su casa en un nuevo encuentro con los medios. «Si me tengo que ir, que sea por aquí, en el centro», dijo planteando otras alternativas como «Ciudad Jardín o la Palloza» y negándose en rotundo en irse a vivir en los barrios periféricos.

Una vez más, los concentrados cuentan con el respaldo de representantes de la política local. Durante la mañana apareció la Policía Local para observar la situación. Ello fue interpretado por los manifestantes como «un movimiento sospechoso». Por ello piden a sus compañeros que resistan y no dejen caer la tensión. Un grupo de personas pasó la noche en el portal de Aurelia Rey, al igual que lo hicieron ayer, para no dejar en ningún momento la casa sin vigilar. Aunque si es cierto que el ambiente es más tranquilo que en las dos últimas jornadas.

La conselleira de Traballo, Beatriz Mato, explicó en una visita a Arteixo que «desde el minuto uno se está trabajando para que Aurelia Rey tenga una vivienda digna y una vida digna». La conselleira también quiso destacar que a pesar de esta situación las sentencias están para cumplirlas, en la misma línea que se manifestó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, siempre garantizando la dignidad de las personas. La titular de Traballo también subrayó que hay muchas personas que están en circunstancias muy difíciles debido a la crisis económica, según informa Susana Acosta.

El colectivo Stop Desahucios, que encabeza el movimiento de apoyo a Aurelia Rey, informó ayer que por un tema administrativo, los desahucios en esta zona del centro de la ciudad solo se llevan a cabo los lunes y los miércoles, y hoy podrían llegar los funcionarios judiciales con la orden que no pudieron entregar el pasado lunes, cuando lo intentaron hasta en dos ocasiones. Tras una suspensión temporal del primer intento, al no poder garantizarse la seguridad de la comisión judicial, en la segunda ocasión se solicitó la ayuda de la policía nacional y se registraron algunos incidentes entre los manifestantes, entre los que se encontraban varios concejales del Ayuntamiento de A Coruña, como el nacionalista Xosé Manuel Carril y el de Esquerda Unida, César Santiso.