Las obras en el Campo da Feira de Cambre destapan posibles restos romanos

Elena Silveira
E. Silveira CAMBRE / LA VOZ

A CORUÑA

Las máquinas desenterraron ayer por la mañana una antigua canalización de aguas residuales
Las máquinas desenterraron ayer por la mañana una antigua canalización de aguas residuales

Los arqueólogos investigan la antigüedad de una estructura hidráulica junto a la que hay fragmentos de tégulas

27 sep 2012 . Actualizado a las 07:01 h.

Los técnicos ya tenían la mosca detrás de la oreja y, efectivamente, las máquinas que trabajan en la remodelación del Campo da Feria de Cambre se toparon ayer con restos arqueológicos que, previsiblemente, son de origen romano. Aunque se habían hecho siete catas arqueológicas con anterioridad y ninguna había detectado nada en especial, los expertos coinciden en que los indicios históricos hacían presagiar algo como lo ocurrido ayer.

Tanto el arqueólogo contratado por el Ayuntamiento para el control de esta obra, Ángel Concheiro, como el experto de Patrimonio de la Xunta que se desplazó a la zona coincidieron en señalar que el hallazgo corresponde a una estructura hidráulica muy común en la época romana. De todas formas, el estudio de unas piezas de teja junto a esa composición ayudará a determinar la antigüedad de los restos.

Desde el gobierno local recordaron que las obras de restauración del Campo da Feira deberán estar finalizadas antes de final de año, ya que, de lo contrario, se corre el riesgo de perder la financiación europea. En este sentido, garantizaron que el hallazgo de los restos arqueológicos no retrasará las obras, ya que las labores de conservación y catalogación se pueden hacer al mismo tiempo que la restauración de la plaza. Además, no habrá que modificar el proyecto original ya aprobado por Patrimonio puesto que la obra no influye ni tendrá impacto alguno en los restos.

De todas formas, el gobierno local estudia la manera para compatibilizar estas obras con la futura puesta en valor de los restos, de forma que queden a la vista de los peatones. Una de las opciones que se barajan es tapar ahora la estructura romana con un material que después pueda retirarse con facilidad para instalar una placa de vidrio protector.