El candidato del BNG a la alcaldía coruñesa se reunió ayer en el edificio de los sindicatos con su hermano, líder de la CIG
15 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Tarde o temprano los hermanos Carril tenían que verse las caras fuera del ámbito familiar y ayer ambos se reunieron en el edificio de los sindicatos, en Alfonso Molina, para tratar cuestiones profesionales. Aunque las cámaras de los fotógrafos intentaban capturar la imagen de los dos hermanos juntos, lo cierto es que cada uno se sentó en un lado de la mesa: Paulo rodeado por el resto de miembros de la dirección comarcal de la CIG y Xosé Manuel escoltado por algunos de los candidatos que le acompañan en la lista del BNG para las próximas elecciones municipales.
Tras las primeras sonrisas cómplices y algunos guiños entre los presentes, Xosé Manuel comenzó a explicar su programa electoral y que buena parte de las actuaciones previstas están enfocadas en la idea de que «A Coruña e a súa comarca sexan motor de desenvolvemento económico». De hecho, para hacer frente a la crisis, el cabeza de lista del BNG apuesta por la intervención pública en la economía con el objetivo, según él mismo comentó, «de incentivar o traballo produtivo, a defensa do emprego digno e os servizos sociais para deste xeito relacional con programas municipais conxuntos a través da aplicación de políticas transversais». Durante el encuentro con la dirección comarcal de la CIG, que se enmarca dentro de la serie de reuniones que el candidato está manteniendo con entidades vecinales y sociales para la elaboración del programa electoral, Xosé Manuel Carril también insistió en el desarrollo de políticas supramunicipales a través de la actuación en la comarca coruñesa y el área metropolitana. «Porque a mellora do benestar e da calidade de vida dos veciños e veciñas tamén pasa polo afianzamento da cooperación institucional nos eidos local, comarcal e metropolitano».
El planteamiento realizado por Xosé Manuel Carril no fue bien recibido por el PP local, que acusó al candidato nacionalista de tener un doble discurso, «ya que afirma defender los servicios públicos mientras las concejalías del BNG apuestan por las privatizaciones». Los populares dicen que el BNG votó a favor de los presupuestos municipales, «que privatizan el 64,3% del gasto social».