El insecto realiza una acrobacia perfecta en menos de una décima de segundo para llegar a sus objetivos con una ejecución inusualmente precisa en animales de su clase
06 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El secreto del salto de la mantis religiosa ha sido desentrañado por dos científicos británicos, Malcom Burrows y Gregory Sutton, después de analizar un vídeo a cámara lenta en el que se puede comprobar la perfecta acrobacia del insecto.
Los investigadores de la universidad de Cambrigde y de Bristol han podido comprobar cómo muchos insectos sin capacidad de volar han desarrollado una serie de mecanismos para poder controlar sus movimientos en el aire y conseguir, de esta forma, llegar a sus objetivos.
En el caso de la mantis, si parpadeamos en el momento del salto, nos lo habremos perdido. Y no es una forma de hablar, porque su brinco dura menos de una décima de segundo.
En el momento de la preparación, el insecto gira la cabeza hacia un lateral para analizar la posición de su objetivo y después impulsa su cuerpo hacia atrás y gira su abdomen hacia arriba, con la punta hacia adelante.
Una vez con las patas y el cuerpo completamente en el aire, las mantis giran para controlar el movimiento, rotando su abdomen y las patas delanteras y traseras independientemente en un orden de gran complejidad.
Se trata de un salto completamente inusual en el mundo de los insectos ya que, en la mayoría de los casos, este tipo de animales pierden totalmente el control de su salto una vez sus patas se separan del suelo, comienzan a girar de forma impredecible y la mayoría se estampan contra el suelo.
Para la investigación, los científicos británicos grabaron a cerca de 400 mantis saltando a objetivos colocados en distintas posiciones, y ralentizando posteriormente los vídeos para analizarlo.