Nolito y Orellana vuelven a dar señales de vida

x. r. c. / l. g. c. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Oscar Vazquez

El Celta echó de menos durante la crisis la producción de sus hombres de ataque

12 ene 2015 . Actualizado a las 10:18 h.

El Celta echaba de menos a sus tres tenores. Dos volvieron a la vida ante el Valencia y Larrivey tendrá oportunidad de comenzar a recuperar el terreno perdido en Cornellá dentro de seis días.

El equipo vigués había vivido de los goles y del juego en ataque de Orellana, Nolito y Larrivey y cuando los tres desaparecieron del mapa, comenzó la cuesta abajo. El Poeta se reencontró con el acierto cuatro meses después para marcar su cuarto tanto en la Liga. Fabián Orellana no anotaba desde el mes de septiembre pasado, en la tercera jornada de Liga, cuando había anotado ante la Real Sociedad en Balaídos.

Orellana fue protagonista para todo el sábado. Para lo malo y para lo bueno. Porque primero disparó al muñeco en una ocasión clarísima en los albores del partido y después golpeó del modo más ingenuo un penalti que pudo poner en ventaja a los celeste.

Un penalti también había errado Nolito en su última comparecencia como celeste en Balaídos. El gaditano llevaba dos meses hacia atrás, como si su estreno internacional le hubiese llevado a un estado de letargo del que no acababa de levantarse. Tampoco ayudó su problema físico, que lo fue mermando y que limitó su trabajo en los entrenamientos. Pero Nolito volvió por sus fueros el sábado con un buen partido en los 45 minutos de que dispuso ante el Valencia. Tuvo desborde, fue seguro en el pase, se asoció, creó peligro y trabajó, y el equipo reaccionó de su mano.

Los dos necesitaban una actuación que marcase también su particular punto de inflexión. Orellana comenzaba a ser más noticia por sus tarjetas que por su juego, de hecho está a una de cumplir el segundo ciclo de amonestaciones, y Nolito había dejado de acaparar titulares descifrando su futuro para convertirse en uno más en la tropa de Berizzo.

La vuelta de Larrivey

Falta ahora el regreso a la vida de Joaquín Larrivey, quien desde el Camp Nou ha perdido el olfato goleador y por encima ha visto como un desliz de Augusto le costaba cuatro partidos de sanción, pero el miércoles, en lo único bueno que le queda al Celta en la Copa del Rey, cumplirá el último y ya estará disponible para visitar al Espanyol el sábado. Justo cuando Charles tendrá que descansar después de ver el quinto cartón amarillo ante el conjunto ché. El brasileño tendrá que seguir esperando por su primer gol en Liga de la temporada.

La contienda con el Valencia también sirvió para confirmar la falta de aportación goleadora de la segunda línea. Apenas se atrevió Augusto.