Luis Enrique, ni frío ni calor

MÍRIAM VÁZQUEZ FRAGA VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Los aficionados recuerdan que Luis Enrique, aunque cumplió su papel a la perfección, nunca llegó a «conectar» del todo con ellos.
Los aficionados recuerdan que Luis Enrique, aunque cumplió su papel a la perfección, nunca llegó a «conectar» del todo con ellos. m. moralejo< / span>

El celtismo resta importancia a la presencia del extécnico celeste en el Barça, próximo rival liguero

27 oct 2014 . Actualizado a las 10:08 h.

Luis Enrique se enfrentará el próximo fin de semana por primera vez al Celta desde que dejó de ser su entrenador el pasado junio. Será con el Barcelona en el Camp Nou, en un partido que para la afición viguesa no adquiere tintes especiales por el hecho de que sea un extécnico de su equipo quien dirija a los culés. Entre el celtismo se le recuerda con respeto y agradecimiento pero, en líneas generales, sin el cariño que despiertan otros antiguos inquilinos del banquillo vigués.

«Creo que el sentir general respecto a él es el de que hizo un buen trabajo, pero que no llegó a conectar nunca con la afición. Vino, cumplió y se fue», valora Tomás Rodríguez, de Preferencia Celeste. Le reconoce el mérito de situar al equipo «en una posición que nadie hubiera imaginado al principio de la temporada», pero cree que algunos detalles justo antes de su marcha empañaron su etapa viguesa. «Se le pedía un poco de sinceridad, en vez de aquel ??no sé si me voy o me quedo?? cuando su salida al Barça era un hecho».

También Miguel Barja, de Merlegos Celestes, señala que en su peña el asturiano dejó más de un detractor tras su paso por Vigo, pero a ellos hay que sumar sus defensores. Él se sitúa a medio camino: «A min gustoume a segunda parte da liga. Recoñezo que ao principio non o tiña demasiado claro, pero cando os resultados acompañan xa non hai moitos peros que poñer e iso foi o que pasou», admite. La división de opiniones a la que se refiere también se traduce en que «hai que pensa que o mérito é do equipo e que o éxito se tería dado igual con ou sen Luis Enrique».

Precisamente, con sus números prefieren quedarse peñistas como Víctor Rodríguez, de Arribada Celeste. «Creo que hizo un año increíble aquí y que mucha gente le ha infravalorado. No hay que olvidar que de su mano empezamos a volver a creer que la permanencia era poco objetivo para nosotros», reflexiona.

Para Irene Rial, de la Peña Afouteza, la de Luis Enrique supone ya «una etapa no olvidada, pero sí de alguna manera superada, que no da ni frío ni calor». Por ese motivo, defiende que el choque será para el Celta como cualquier otro en Barcelona. En todo caso, sí cree que el pasado céltico de Luis Enrique puede dar «todavía más ventaja» a los suyos. «Conoce los puntos fuertes y débiles, pero no sé si será muy relevante», opina.

Bele Dios, de Carcamáns, es de los que reduce el legado del técnico al de alguien que «veu, soubo cumprir coa súa función e marchou». Y añade que lo que más echa de menos de él es «que non deixara aquí este ano a Rafinha», además de recordar que «só estivo un ano e outros como Herrera deixaron máis pegada».

Un partido para reivindicarse

La mayoría coinciden en que si alguien estará motivado en el enfrentamiento entre el Celta y el actual club de Luis Enrique serán los célticos que trabajaron a sus órdenes. «Os xogadores sempre o queren facer ben no Bernabéu e no Camp Nou e botar o resto. Neste caso, ademais, están moi contentos con Berizzo e quererán demostrar que o equipo que son agora e a posición que ocupan non son froito só do que el fixo», argumenta Barja.

En la misma línea, el representante de Arribada Celeste comenta que «aunque el Toto continúa la idea anterior, ha sabido diferenciarse e imprimir su toque». Va más allá Tomás, que recuerda que el actual equipo es consecuencia de una evolución que comienza mucho antes. «Tanto Luis Enrique el año pasado como Berizzo ahora recogen un trabajo que empieza con Eusebio, tanto en estilo como en apuesta por la cantera», opina.