El Celta, ante el laberinto granota

M. V. F. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Lucas Alcaraz debutará en Vigo como técnico del Levante tras el cese de Mendilibar

22 oct 2014 . Actualizado a las 13:55 h.

El Levante se presentará el viernes en Vigo con un nuevo entrenador -Lucas Alcaraz- después de que en la noche del lunes se anunciara por sorpresa el cese de José Luis Mendilibar. La plantilla del equipo valenciano, que ayer trabajó a las órdenes del técnico del filial, Miguel Ángel Villafaina, comenzará hoy a preparar el partido de Vigo con solo dos días de margen sobre un choque vital para los intereses de los granotas.

El nombre que sonó desde el primer momento como posible sustituto de Mendilibar fue el de Lucas Alcaraz, cuyo fichaje confirmaba el propio Levante en la noche de ayer. Suya será la responsabilidad de hacer resurgir a un conjunto que es penúltimo en la tabla con cinco puntos, pero que nunca ha salido derrotado de Balaídos en Primera División en tres enfrentamientos.

La situación que vivirá el viernes Alcaraz la han experimentado otros entrenadores previamente en Balaídos. La última ocasión en enero de este año, cuando Calderón debutó con derrota en el banquillo del Betis como visitante en el municipal vigués.

Los célticos, desconfiados

Pese los precedentes favorables y a que Alcaraz tendrá apenas dos sesiones de entrenamiento para preparar con los suyos le choque, Larrivey quiso advertir ayer de que el relevo en el banquillo convierte al Levante, a su juicio, en un rival «más peligroso» para ellos. «Es un partido dificilísimo, ante un equipo que viene un poco herido. El cambio de entrenador siempre es estimulante, ya que se renuevan las esperanzas de jugar de todos».

También Álex López, «sorprendido» por la noticia, comentaba que se lo toman «conociendo un poco cómo va esto, que no se sabe el efecto que puede tener». Aunque recalcaba que para ellos debe ser secundario. «Lo que estamos es mentalizados para llegar en las mejores condiciones al partido, nuestra idea es que todo depende de lo que hagamos nosotros».

Ambos coincidían en que el nuevo técnico no tendrá demasiado tiempo de cambiar la forma de jugar del Levante. «No creo que varíe estilo, sobre todo cuando ha pasado de manera tan repentina. No será fácil que el nuevo entrenador imponga su esquema de un momento para otro», decía Larrivey. En todo caso, insistía en que prefiere pensar en lo propio. «Es mejor centrarnos en nuestras armas y no en sus problemas internos», concluía.