Contención con un punto ofensivo

Lorena García Calvo
lorena garcía calvo VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Esteban Pavez combina físico, técnica y gusto por sumarse al ataque

21 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Un mediocentro de corte defensivo. Ese era el perfil que el Celta buscaba desde hace tiempo para reforzar su centro del campo, sin embargo, Esteban Pavez, el hombre que se perfila como el elegido para el puesto, da un giro a esa definición. Nacido en Santiago de Chile en 1990, el todavía jugador de Colo Colo -hoy se reúne con su club para cerrar su traspaso y se prevé que viaje el miércoles- se define como un «cinco con mucha ida y vuelta», un mediocentro que a su labor de corte añade la de creación. Y es que Pavez entiende que en el fútbol moderno su puesto debe crear, además de destruir.

Técnico, muy físico y con tendencia a pisar el área contraria, la de Esteban Pavez es la historia de un futbolista que, a pesar de los reveses, no tiró la toalla en su búsqueda por hacerse un hueco en la élite. Formado en las categorías inferiores de Cobreloa, pronto llamó la atención de los responsables de la cantera de Colo Colo, club con el que debutó en la máxima categoría del fútbol chileno en 2009, cuando contaba 18 años. Ese estreno, sin embargo, fue casi testimonial y durante las siguientes campañas se sucedieron las cesiones. Rangers, Arica y Temuco fueron sus destinos. Un camino que se le hizo largo y que superó agarrándose a la idea de que algún día conseguiría abrirse paso en las filas del campeón chileno. Lo logró en 2013, cuando comenzó a encadenar partidos y a ganarse el calificativo de jugador indiscutible en el once de los de Santiago.

«Lo mío pasa mucho por la resistencia y por correr todo el partido. Pocas veces termino cansado». Así se definía no hace mucho Esteban Pavez. El mediocentro, de 1,80 de estatura, es un futbolista aguerrido y con resistencia, una cualidad que le permite sumarse al ataque y recuperar su posición sin caer en el agotamiento a mitad de partido.

Esa capacidad física del chileno se complementa además con aptitudes técnicas pulidas a lo largo de los años y que le han valido para convertirse en uno de los mediocentros más respetados de su país. Ha debutado con la selección chilena, y ahora le queda como reto entrar de nuevo en los planes de La Roja.

El mediocentro, diestro, ha exhibido en Colo Colo su capacidad para guardar la posición sin renunciar a sumarse al ataque y se define a sí mismo como un «volante moderno». Es consciente de que su primera obligación es la de contener en el medio campo, pero no renuncia a sumarse a la ofensiva. Su habilidad para proyectarse en el ataque quizás venga de su etapa como cedido. En el Temuco llegó a jugar algunos partidos como mediapunta, y en Colo Colo se ha animado más de una vez a la hora de marcar gol. Asegura que le gusta «pisar las dos áreas», y probar suerte en la finalización de jugadas. Tiene un buen remate a media distancia y sabe leer el juego para buscar pases con los que habilitar a sus compañeros.

Constancia y regularidad

Si por algo se ha caracterizado Esteban Pavez es por su regularidad. El chileno no es un hombre de picos de forma, sino que mantiene un nivel similar a lo largo de todo el campeoanto. La última temporada en Colo Colo dio un paso al frente y eso le ha permitido ponerse en el punto de mira de clubes como el Celta.

En Chile apuntan que hoy se debería cerrar su llegada a Vigo, puesto que ayer el fleco pendiente con Colo Colo era cuál de los dos clubes asumiría el porcentaje de la operación que le correspondería al futbolista.