Un puntal para la banda izquierda

Marta de Dios Crespo
MaRTA DE DIOS LUGO / LA VOZ

CDLUGO

OSCAR CELA

El Lugo cerró anoche el fichaje del extremo catalán Adriá Carmona

22 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Lugo buscaba apuntalar su lado izquierdo, mermado tras la salida de David Ferreiro y Jonathan Pereira. Adriá Carmona (Igualada, 1992) ha resultado ser el hombre de banda para reforzar al conjunto de Luis César Sampedro este curso. Formado en la cantera del Barça, cuando todavía no había cumplido los 19 años, dio el salto al Milan. No llegó a debutar con el primer equipo, aunque su etapa de contrato con el conjunto italiano aprovechó para acumular experiencia en equipos de Segunda. Pasó por el Zaragoza en la temporada 2012-2013, aunque no contó con demasiado protagonismo.

Se hizo su sitio un año más tarde en el Girona, donde llegó a disputar 20 encuentros. Antes de recalar en el Albacete, su club de procedencia, Carmona vistió la camiseta del filial del Espanyol, donde marcó siete goles en 28 partidos. Con los manchegos marcó un gol y dio tres asistencias en 22 partidos.

Conexión con Luis César

Sus características, su juventud, su conexión con Luis César y su carta de libertad en el Albacete le convirtieron en el candidato perfecto. Extremo izquierdo con polivalencia de mediapunta, Carmona es un jugador rápido y vertical. Imaginativo y con capacidad de desborde.

«Tuvo mala suerte, a principio de temporada se fracturó el pómulo y empezó algo lastrado», dice Dani Mallo, que compartió vestuario con el futbolista catalán la temporada pasada. «Es muy explosivo y a pesar de ser tan joven ha pasado por grandes equipos. Salvando las distancias, pero es una especie de Neymar, porque tú le das el balón y él inventa», comenta el portero coruñés, que también militó en el Lugo entre el 2013 y el 2015. «Es muy buen chicho, a mí me quedó muy buen recuerdo», señala el cancerbero sobre su aspecto más personal.

Firmó a principios de la temporada pasada, con los albaceteños, por dos campañas. Sin embargo, su agente, Mágico Díaz, aseguraba ayer antes de que se hiciese oficial el fichaje del jugador que «tiene la carta de libertad en la mano». Cuando llegó al Albacete comentó en sus primeras declaraciones como jugador que compartía la visión de juego de Luis César: «Crecí en la escuela del Barcelona, de mucho toque, tener el balón, paciencia, y creo que es un juego atractivo para mi perfil, un extremo con desborde». Una filosofía que le hacía encajar a la perfección con el puzle del Ángel Carro. Finalmente la firma con los rojiblancos se comunicó de forma oficial cerca de la medianoche.

Contra el Lugo se enfrentó en dos ocasiones, ninguna el año pasado. En el Carlos Belmonte, el jugador se encontraba impedido por molestias musculares. Acudió al partido de vuelta en el Ángel Carro, pero no llegó a jugar. Las dos veces que lo hizo fue defendiendo los colores del Girona, cuando apenas contaba con 21 años. En ambos fue titular. Delantero en la ida (1-2 en el Ángel Carro) y mediapunta en la vuelta (6-0 en Montilivi).