Otra varita mágica de Carlos Pita

Marta de Dios Crespo
Marta de Dios LUGO / LA VOZ

CDLUGO

CARLOS CASTRO

El mediocentro marcó un zapatazo parecido en la pretemporada 2011

25 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El gol de Carlos Pita en Oviedo, desde la frontal del área, abrió el partido en el Tartiere. El chicharro del domingo no fue el primer zapatazo exitoso que regala el mediocentro del Lugo a los suyos. A pesar de que los tantos del rojiblanco suelen llegar de jugadas a balón parado, Pita ya ha demostrado su pegada en jugadas con profundidad.

Su debut liguero esta temporada no pudo tener mejor rúbrica. El coruñés firmó el mejor gol del partido ante los ovetenses, abriendo el marcador y cumpliendo además con la consigna de Luis Milla. El entrenador rojiblanco le pidió al mediocentro «que llegue más». Recibió el balón en el minuto 15 con un pase de Sergio Marcos desde el centro del campo, controló bien Pita que inició la galopada hacia arriba, superando a un contrario y sorprendiendo a la zaga ovetense con un derechazo cruzado que pega en el poste y se cuela dentro. Esteban la vio venir y se tiró para el lado correcto, pero el portero local no pudo detener el tiro.

La obra de arte recordó a otra que el mediocentro firmó en la pretemporada 2011, fue en un partido ante el Celta que se disputó en el estadio A Marosa de Burela. En caída, golpeó el balón desde el centro del campo y sorprendió a un Yoel adelantado que, a pesar de acariciar el esférico no pudo evitar que este se alojase en el fondo de la red. El golazo llegó como agua de mayo para un Lugo que perdía por 1-0. El equipo, comandado entonces por Quique Setién, venció a los vigueses por 1-3. Fue el mismo encuentro en el que el técnico cántabro apareció cuando ya se habían consumido 30 minutos.

Un maestro a balón parado

Con su 1,87 de estatura, Pita destaca en las jugadas a balón parado como uno de los jugadores que mejor va de cabeza en el conjunto rojiblanco. Desde que viste la camiseta del Lugo, Pita ha marcado cinco tantos en partidos oficiales. Tres de ellos fueron de córner y en dos de ellos remató de cabeza. Ante la Ponferradina en la temporada 2012-2013, su gol dio el triunfo a los suyos como ante el Murcia la campaña siguiente. Ese encuentro se resolvió en tablas. El otro remate de un saque de esquina que terminó en gol fue esa misma temporada, la más goleadora de Carlos Pita, fue ante el Mirandés en el minuto 73. Un chicharro que mandó a los burgaleses a Segunda B.

La temporada pasada Pita sumó un único tanto en su cuenta. Fue ante el Valladolid en la segunda jornada. Manu disparó entonces una falta lejana que repelió la escuadra visitante. Pita vio el balón perdido y remató con un trallazo que dio la victoria a los suyos. El del domingo fue su segundo tanto fuera de casa en un partido oficial.

Manu cree que todavía «hay que corregir errores»

El capitán del Lugo cree que en el Lugo todavía «hay que corregir errores y seguir en esta línea». Así se expresaba Manu tras el primer partido de Liga. «El vestuario al final está contento porque un empate aquí no iba a ser nada fácil. Es una pena que nos empatasen a los cinco minutos de haber marcado. Creo que si hubiéramos aguantado un poco más habríamos tenido más espacios y el equipo hubiera corrido más arriba», valoraba el lateral izquierdo.

Conseguir rascar un punto en el Tartiere «no está mal para empezar», añadía. «Lo que nos lastró un poco es haber marcado y que nos hubieran empatado rápido, les dimos un poco de alas y ahí si que nos costó. Pero para ser el primer partido, ante un Oviedo y fuera de casa, es para estar contentos», insistía Manu.

«El equipo está cogiendo muy bien lo que quiere el míster, estamos más juntos. Nos cuesta mucho más que nos marquen gol y tenemos un juego más vertical», comentaba sobre la asimilación de los nuevos conceptos que imprime Luis Milla desde el banquillo. «Quizás ofrecemos un juego menos previsible que el año pasado y que muchos equipos ya nos conocían. Hay que seguir, aún queda mucho y el punto nos da mucha confianza», confesaba y añadía que la satisfacción con el resultado está justificada: «Estamos contentos, después de un verano en el que hubo muchos cambios, a nivel de equipo y a nivel institucional».

Con la vista puesta ya en la próxima jornada, el Lugo recibirá en casa al Llagostera, Manu anunciaba que será un partido «difícil» y aboga por «intentar hacernos fuertes» en el Ángel Carro. «Ahora recuperar, ver los errores que tuvimos y a partir del martes ya pensar en el próximo rival», apostilló.