«Los cuentos son un recurso fundamental, dentro y fuera del aula»

V. Couto, P. Blanco CARBALLO / LA VOZ

VIMIANZO

Su intervención abrirá esta tarde en Vimianzo los Encontros «Falar, Cantar e Contar», del CFR A Coruña

10 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Escritora, performer, cuentacuentos y actriz de doblaje. Aunque se inició profesionalmente en el periodismo (se licenció en la Complutense de Madrid) y la crítica de arte, actualmente se dedica por completo a la escritura, la interpretación, la gestión cultural y la actividad docente. Así se presenta en su web Gracia Iglesias (Madrid, 1977), autora de un blog sumamente interesante: La domadora de cuentos. El dragón de la Chimenea, El mundo de Casimiro o El Tren de los Ronquidos son algunas de sus obras. Tiene también publicaciones para adultos y varios premios y menciones literarias. Gracia vivirá hoy un día intenso en la comarca y lo acabará en Vimianzo, donde intervendrá a las 18.00 horas, en la Casa da Cultura, siendo la suya la sesión inaugural de los Encontros «Falar, Cantar e Contar», organizados por el Centro de Formación e Recursos do Profesorado de A Coruña. ¿Es posible recuperar los cuentos como herramienta lúdico-educativa en este mundo actual de incesantes estímulos? ¿Es posible volver a la voz, a la escucha y al contacto humano? Gracia cree que sí y así lo dijo en Radio Voz. Estas son algunas de sus palabras:

-Su ponencia en Vimianzo es «Clase de contos, contos en clase». ¿En qué consistirá?

-Simplemente, desde mi experiencia como escritora de literatura infantil y cuentacuentos, que llevo muchos años haciéndolo, hablaré de lo bonito, enriquecedor y positivo que es usar los cuentos en clase. No me cabe duda de que el profesorado que acuda al encuentro ya lo sabe, pero también se trata de darles recursos que yo manejo para que ellos los puedan emplear y así sacarles el máximo partido a los libros y a la imaginación de los niños, que es un fondo magnífico y muy rico de experiencias.

-¿Por qué es tan importante esto de contar cuentos?

-Porque son magníficos para muchas cosas en el crecimiento de las mentes infantiles: potencian el desarrollo de la creatividad, alientan la atención y concentración en este tiempo de tantos estímulos, desarrollan su espíritu crítico, fomentan su punto más lúdico y generan un sentimiento de educación compartida. La clase deja de ser unidireccional, desde el maestro a los niños. Se pueden transmitir valores muy positivos, conocimientos transversales, y se enriquece asimismo el vocabulario, la expresividad y el conocimiento de las emociones propias, la empatía... En fin, no terminaría: para mí los cuentos son un recurso fundamental, tanto dentro del aula como fuera.

-¿Lo saben los profesores?

-Pienso que sí, que lo tienen claro, pero a veces se encuentran con limitaciones. Quizás hay un montón de prejuicios sobre lo que se puede y no se puede contar, o sobre las propias capacidades de uno. Si te pones, lo sabes hacer. Hay que adentrarse, ser valiente, experimentar. Eso es lo que yo quiero transmitir en estos encuentros. En gran medida parte todo de miedos, pero a veces también es falta de tiempo. No obstante, abriendo un poco el ángulo, se encuentran cuentos magníficos, que a veces requieren un pelín más de esfuerzo que los que se llevan manejando toda la vida, pero merecen la pena.

-¿Forma parte de ese fallo del sistema educativo actual del que tanto se está hablando?

-El sistema educativo español necesita una revisión urgente y profunda. Se están haciendo cosas mal y no es precisamente solo el profesorado, sino todas las instancias involucradas. Sé, positivamente, por otra parte, que hay muchas escuelas o colegios rurales y, y muchas están en Galicia, que están haciendo un trabajo buenísimo, saliéndose de los cánones, yendo a contracorriente. La creatividad es fundamental. Nos quedamos mucho en la memorización, en la superficie, y así nos encontramos incluso con muchas personas que no comprenden lo que leen o lo que escuchan.