Los 50.000 euros de inversión prevista se suman a la ya realizada con la humedad
21 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La actuación realizada por la empresa carballesa Decoraciones J. Bello en la iglesia románica de San Xián de Moraime ha surtido efecto. Los 105.000 euros invertidos por la Consellería de Cultura han servido para eliminar de manera muy sustancial los problemas de humedad y los frescos de los siete pecados capitales y la muerte están perfectamente secos. De ahí que el departamento que dirige Román Rodríguez se comprometiese ayer en Santiago, en una reunión mantenida por el alcalde de Muxía, Félix Porto, con técnicos de Patrimonio, a iniciar la restauración de las pinturas después del verano.
La intervención ya realizada sobre el mural de la fachada oeste, en la que se puede admirar una representación del papa Pío II, le ha valido a los especialistas para tomar referencias con las que ahora elaborarán un proyecto de actuación, que incluirá una lectura de los murales dentro del programa iconográfico y la historia del templo. Redactarán los mapas de estado de conservación y de control de temperaturas y humedades para meterse de lleno con las pinturas.
Sobre ellas lo previsto es consolidar el soporte y los estratos de policromía, además de eliminar antiguos morteros de restauración, aplicarle un tratamiento contra el biodeterioro y, por último, recuperar los colores originales.
Agradecido
La lucha para evitar que se pierdan estas obras, únicas ya no solo en la Costa da Morte y en toda Galicia por su particular iconografía, ha implicado durante años a mucha gente del mundo de la cultura, el patrimonio, la divulgación,... De ahí que ayer, el alcalde, Félix Porto, que había planteado la recreación de la Cea do Infante Alfonso como una reivindicación en este sentido, ayer se mostrase satisfecho y agradecido. «É un patrimonio único que estaba a pique de perderse e penso que esta noticia vai ser motivo de alegría para moitas persoas. Por iso quero agradecerlle o seu esforzo, o dos medios de comunicación que estiveron implicados nisto e o de todo o mundo», señala Porto.
El regidor, que está a la espera de confirmar otra actuación de gran trascendencia patrimonial para Moraime, solo tiene buenas palabras para del departamento de Cultura de la Xunta, que pese a los plazos, que en algunas ocasiones han llegado a ser desesperantes para él, está «cumprindo co prometido».
La historia de la iglesia de Moraime, asociada al monasterio benedictino que ahora aspirar a convertirse en un hotel de lujo, le sitúan como la principal referencia del románico de la Costa da Morte, con algunos valores añadidos como los propios frescos o el rico patrimonio arqueológico del entorno, en buena medida todavía por descubrir.