La esencia local triunfa en Fisterra

Juan Ventura Lado Alvela
J. V. Lado CEE / LA VOZ

FISTERRA

El arquitecto César Portela, el pintado de la iglesia, el cierre peatonal, el cura y los políticos fueron el blanco de las sátiras

07 feb 2016 . Actualizado a las 13:37 h.

Ir al concurso del Entroido de Fisterra sin la maleta bien repleta de sátiras hacia los políticos locales y los temas socialmente candente es un suicidio en toda regla. La comparsa de Lires lo intentó con su Lirex, a última aldea (de) gala, y la de Gures presentó un buen espectáculo teatral con el Afundimento do Titanic quedaron completamente superadas por las tres agrupaciones fisterranas. En esa batalla local se llevó el gato al agua, o más bien al hielo Tortugas y Peces, con una impecable recreación basada en la película Frozen, que tuvo de todo: excelentes disfraces, una representación de altura y, sobre todo, canciones personalizadas con la mordacidad propia del carnaval más emblemático de la Costa da Morte.

Os Nenos do Coro no le anduvo a la zaga con su interpretación de la La Bella y la Bestia, pero se tuvo que conformar con el segundo lugar por delante de Os da Charca y su Ano novo chino, que puso sobre el suelo del pabellón quizás el mejor juego de equilibrismo que se ha visto allí.

A excepción de los de Gures, con un espectáculo exportable a cualquier otro lugar, todos repartieron cera y de la buena en clave local, con el arquitecto César Portela y el exalcalde, José Manuel Traba -que estuvo ausente al igual que el resto de concejales del PP por el cambio de día del concurso- fueron los blancos principales de las mofas.

También tuvo un lugar destacado, con varios personas y canciones dedicadas el teniente de alcalde, Kuka Sar, que iba disfrazado de policía, a cuenta de los estacionamientos, los horarios de recogida de basura y, sobre todo, de su recurrente «medre o mar» del Facebook. Tampoco se escaparon el edil de CG, Xan García, ni los miembros socialistas del gobierno caracterizados como personajes de Batman. El alcalde, José Marcote, enfundado en su traje de superhéroe, pasó inadvertido para Os da Charca, pero no para Os Nenos do Coro, que le dedicaron su protagonista transformado en Bestia, que calcó el modo pausado, casi flemático del regidor.

Para todos

Recibió el cura, las vecinas criticonas, los políticos que beben «sen sede», el Juez de Paz, los activistas pelmas de las redes sociales y sobre todo, el «innombrable», como denominaron a Portela y a su pintado azul de Santa María das Areas.

Incluso el conductor, Xurxo Souto, que sin ser Roberto Traba, se metió y mucho en el papel ironizó con que sea el pregonero del año que viene.

el festival emblemático de la costa da morte