Policía y Guardia Civil desalojaron ayer por la mañana la playa fisterrana donde había personas instaladas con tiendas, toldos y desperdicios diversos
23 jun 2015 . Actualizado a las 10:14 h.El nuevo gobierno de Fisterra se ha decidido a encarar de frente el problema de las acampadas ilegales en Mar de Fóra, y como ya hizo en varias ocasiones antes el Concello, la Policía Local y la Guardia Civil desalojaron ayer por la mañana tanto a las personas instaladas de manera irregular en la playa como todos sus enseres: tiendas, toldos y desperdicios diversos.
Los agentes ya acudieron el viernes para conminar a los campistas a que se fuesen, pero hicieron caso omiso, con lo que ayer volvieron con la ley de Costas en la mano para identificar a los autores de faltas graves como es la acampada ilegal y varias leves, como alterar las condiciones de limpieza del lugar. Denuncias que ahora tramitará el Concello ante la Demarcación de Costas para que instruya los correspondientes expedientes sancionadores.
En total, fueron desalojadas 12 tiendas, de las cuáles dos las retiró y requisó la Guardia Civil por desconocerse sus propietarios, algo habitual en este tipo de intervenciones, ya que algunos de estos bienes quedan abandonados en la playa o son utilizados por diferentes personas con el paso del tiempo.
Como explicó hace unos días el alcalde, José Marcote, desde el Ayuntamiento «non pode ser que catro señores fagan de Mar de Fóra o seu coto persoal. Iso hai que erradicalo» y tienen voluntad firme de hacerlo.
Preocupación porque vaya a más
«Esta problemática volve a reproducir unha situación non solucionada nos veráns anteriores. Está a causar un fondo malestar nos usuarios da praia e deteriorando un espazo ecolóxico de alto valor, que recordamos está protexido», explica el edil del BNG Xan Carlos Sar, que se encarga de estas competencias en el nuevo gobierno municipal. Incide en que «preocupa que o problema poida medrar durante o verán, polo que estimouse preciso actuar xa».
Conscientes de lo que ha ocurrido otras veces y de la dificultad que tiene solucionar este asunto, como ya comprobó el anterior alcalde, José Manuel Traba, el Concello va a mantener en los próximos días un dispositivo de vigilancia para actuar de nuevo en caso de que el problema continúe. En este caso se aplicarán las sanciones previstas en la citada que ley que establecen una multa diaria de 40 euros por metro cuadrado ocupado.
Ahora está por ver que efectos tienen las medidas respecto otras zonas del pueblo, porque tampoco es la primera vez que el desalojo de Mar de Fóra da lugar a asentamientos irregulares en otras zonas, tal como denuncian repetidamente la Asociación de Veciños Costa da Morte y su presidente, Fernando Carrillo. De hecho, a partir de los campamentos de la playa el invierno pasado se produjo la ocupación de una casa en construcción en la Recta da Anchoa que, a día de hoy sigue en la misma situación irregular.
Ahora en Cee
Curiosamente, casi a la par que las fuerzas de seguridad actuasen en Fisterra, un problema de índole similar ha brotado nada menos que en la playa de A Concha, en pleno casco urbano de Cee, donde la noche pasada había instaladas dos tiendas de campaña. Los toldos desaparecieron durante el día y quienes aparentemente son sus propietarios se instalaron en la zona del parque infantil.
En principio podría tratarse de una cuestión aunque ilegal, anecdótica, porque no existe un problema de este tipo en Cee como hay en Fisterra aunque el alcalde, Ramón Vigo, tampoco quiere tenerlo. Ayer por la tarde aseguró que desconocía tal asentamiento porque pasó la mañana realizando gestiones en A Coruña, pero aseguró que, en cualquier caso, va a girar instrucciones a la Policía Local para controlen la situación y que no dé lugar a mayores inconvenientes.