El Concello tiene definida la Ordenanza Municipal Reguladora da Limpeza Viaria, Ornamentación Pública e Protección do Patrimonio Municipal
23 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Fisterra, después de múltiples reclamaciones vecinales, quejas de la oposición y un acuerdo de los tres partidos tiene su nueva Ordenanza Municipal Reguladora da Limpeza Viaria, Ornamentación Pública e Protección do Patrimonio Municipal. Un texto normativo que, por ejemplo, establece sanciones que van desde los de 600 a los 1.500 euros, dependiendo de la gravedad de los hechos, la reiteración y otra serie de variables.
Entre las cuestiones reguladas, que se podrían resumir en «queda prohibida calquera operación poida ensuciar as vías e espazos públicos» hay muchas de sentido común, como que no se puede arrojar basura a las calles o que de las propiedades privadas debe ocuparse su dueño, y otras bastante más específicas.
Por ejemplo se detalla la necesidad de retirar de la vía pública el mobiliario una vez terminada la correspondiente concesión municipal o que los titulares de quioscos y otros puestos autorizados se tengan que ocupar de la limpieza del espacio que utilizan en su actividad.
También figuran acciones que darán que hablar como la prohibición de «satisfacer necesidades fisiolóxicas na vía pública» y vetos que, de vigilarse el cumplimiento estricto de la norma, acabarían con prácticas más que arraigadas como sacudir las alfombras por las ventanas o lavar los coches en la calle.
En lo que se para especialmente la ordenanza es en los carteles, letreros, pintadas, panfletos... que, en general, están todos prohibidos a no ser que exista una autorización municipal expresa para ello. De tal modo que, algo tan común como la colocación de panfletos publicitarios en los limpiaparabrisas de las coches, queda ahora fuera de las prácticas permitidas.
Por supuesto, se incluye la obligación de que los propietarios de mascotas recojan sus deposiciones de las calles, algo que hasta el momento es un importante problema a los ojos de vecinos y visitantes. Está sancionado utilizar los árboles para colgar pancartas, banderolas o similares y los bajos hay que tenerlos cerrados con bloque o ladrillo y, en su caso, pintarlos.