El proyecto sobre biocombustible de batata se traslada a Cabana

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

CORISTANCO

Los terrenos calificados como industriales están en la zona de Nantón.
Los terrenos calificados como industriales están en la zona de Nantón. josé manuel casal< / span>

Las plantaciones se realizarán en los terrenos del polígono de Nantón

21 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El grueso del proyecto de la empresa Termo-biológicas para fabricar biocombustibles a base de batata se ha trasladado a Cabana, después de que la compañía intentara llegar a un acuerdo con los propietarios de los montes de Coristanco. Las exigencias de control sobre la actividad habrían dado al traste con la posibilidad de alquilar las fincas forestales por parte de la compañía y utilizarlas para el cultivo a nivel industrial del tubérculo y los terrenos de titularidad municipal que iban a convertirse en polígono empresarial son insuficientes para la magnitud de la iniciativa.

Sí se mantendrá en Coristanco la parte de investigación y siembra. De los viveros de San Mamede saldrán las plantas que después se cultivarán en invernaderos con bandejas, por lo que la calidad de la tierra no es importante para este proyecto. De hecho, Termo-biológicas siempre ha buscado fincas industriales o forestales sin valor agrícola. También se mantendrá en el municipio coristanqués la parte de formación de los trabajadores, que correrá a cargo del centro de promoción rural EFA Fonteboa. La compañía ha suscrito convenios tanto con la escuela como con Abel Lage, propietario del vivero, que se encargará de la dirección del proyecto en la parte agrícola.

Según varias fuentes, la compañía, financiada con fondos internacionales, habría tenido muy en cuenta la actitud del alcalde de Cabana con el proyecto de la mina, ya que en ningún momento cambió de opinión al respecto y siempre defendió la misma postura. José Muíño no quiso hacer ayer declaraciones al respecto, argumentando que tiene un contrato de confidencialidad, que la empresa ha hecho firmar a todos los que han tenido contacto con ella desde que desembarcó en Bergantiños.

La idea está protegida por más de veinte patentes y consiste en transformar la batata en biocombustibles y bioetanol. En principio se pensó instalar la factoría en Langosteira, ya que toda la producción será para la exportación, pero el cambio de ubicación ha aumentado las posibilidades de Brens, que es otro puerto adecuado para los graneles.

Según informaron fuentes de la empresa, que ha sido creada para sacar adelante esta iniciativa, la elaboración de los biocombustibles de alto rendimiento, se realiza con el uso de energía solar, sin ninguna emisión de CO2 y con total protección medioambiental.

Estudios realizados por el departamento de agricultura de Estados Unidos ponen de manifiesto que la batata rinde hasta el triple que el maíz en la fabricación de bioetanol.