Detenida una camariñana por la venta de mejillón con toxina

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CORCUBIÓN

Una familia vimiancesa fue hospitalizada por náuseas y vómitos

27 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Agentes del Servicio de Protección da Natureza (Seprona) del puesto de Corcubión detuvieron este miércoles por la mañana a una camariñana, a la que investigan por un presunto delito contra la seguridad pública. En concreto, por la venta de mejillones con toxina, pese a que la Xunta de Galicia ha decretado el cierre de los polígonos bateeiros hasta nueva orden.

Los hechos ocurrieron el pasado día 20 (viernes). Un matrimonio, residente en Braño, en la parroquia vimiancesa de Carantoña adquirió a una autónoma cinco kilos de mejillones. Estos moluscos fueron utilizados al día siguiente para hacer una paella, comida a la que asistieron otros tres integrantes de la familia, uno de ellos menor de edad.

Sobre las once de la noche estas cinco personas empezaron a sentir malestar general, que fue a más al sufrir vómitos y náuseas. Dado que las molestias no solo no remitían, sino que iban a más, se trasladaron al punto de atención continuada de Vimianzo y, de ahí fueron derivados al Hospital Virxe de Xunqueira de Cee. Los médicos les diagnosticaron una indigestión, atribuida a la ingestión de molusco en mal estado. Los cinco integrantes de esta familia permanecieron ingresados en el centro hospitalario ceense hasta la mañana del domingo, cuando fueron dados de alta. Los afectados interpusieron una denuncia ante la Guardia Civil, quedando el caso adjudicado al Seprona del puesto de Corcubión. Los agentes abrieron una investigación para conocer el origen de esa partida de mejillones. Este miércoles por la mañana, sobre las 9.30 horas, según varios testigos, se personaron en el mercado de Camariñas varios agentes, para realizar una inspección en el establecimiento desde el cual, supuestamente, saldrían estos cinco kilos de mejillones.

Con un abogado

Una vez finalizada la investigación, los agentes trasladaron al titular del puesto a las dependencias de la Guardia Civil del puesto de Camariñas. Tras prestar declaración, la mujer investigada salió hacia el mediodía del puesto acompañada de un abogado.

Los agentes del Seprona atribuyen a esta autónoma un delito contra la salud pública. En la lonja de Camariñas hay un cartel indicativo que la extracción y comercialización de moluscos queda terminante prohibida hasta nueva orden por parte de la Xunta de Galicia.