Los clubes de la Liga da Costa expondrán a Louzán sus demandas para evitar nuevos incidentes, como los del fin de semana
24 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los hechos que tuvieron lugar el pasado fin de semana en O Rodeiro y As Redondas, que terminaron con dos jugadores trasladados al Virxe da Xunqueira de Cee, han puesto en alerta tanto a clubes como a la Federación Galega de Fútbol acerca del estado de los terrenos de juego de la Costa da Morte. El próximo día 13 de marzo tendrá lugar una reunión en Baio para que los equipos expongan sus demandas.
La gran preocupación que existe no se encuentra sobre el verde, sino en su perímetro. Las vallas donde habitualmente se apoyan los espectadores para ver los partidos han sido protagonistas estos días. Rafa Ramos, del Ameixenda, se topó con un borde de cemento tras la línea de fondo cuando disputaba un balón. No pudo evitar golpearse la cabeza. El presidente de la federación, Rafael Louzán, confirmaba que desde este ente se está elaborando un análisis arquitectónico de los campos y sus instalaciones, «punto a punto e campo a campo». Por otra parte, el delegado de la Costa, Manuel Corredoira, también insta a estudiar cada caso, sobre todo en la Tercera, para dar solución a la problemática de las vallas y cierres: «A inmensa maioría dos campos cumpren cos mínimos de distancia. Proba diso é o tempo que levabamos sen ter unha lesión deste tipo».
Algunos de los ejemplos de campos donde los cierres pueden provocar lesiones e incidentes por su cercanía con el terreno de juego son los de O Rodeiro (donde juega el Camelle) o A Grixa (del Porteño). En ambos casos, el hecho de que ha transcurrido un largo período de tiempo desde las últimas reformas, provocan que el estado de las vallas y cierres, de metal o cemento, no sea el adecuado. La falta de materiales amortiguadores provoca que los jugadores, inmersos en la acción del partido, puedan golpearse y causarse lesiones. Otros campos como As Cabreiras de Vimianzo o el Ara Solis de Fisterra también es mínima la distancia guardada.
El 7 de enero también tuvo que entrar una ambulancia en el Municipal da Laracha. Fue durante el encuentro entre el Club do Mar y el San Tirso. Un jugador visitante impactó contra la valla de acero de uno de los fondos cuando trataba de central al área. El golpe seco desorientó al futbolista, que tuvo que ser trasladado al hospital.
«Non é un problema que suceda só na Costa da Morte. Reunións como a que teremos en Baio buscan que, de cara á próxima tempada, se resolvan estas imperfeccións», afirma Rafael Louzán.
Desfibriladores
Por otro lado, cada vez más equipos de la zona tienen desfibriladores y equipos de emergencias para agilizar las actuaciones en caso de lesión. La federación continúa colocando estos aparatos en sus campos.