Parte activa de Crea Formas, inauguró en el Pazo carballés la exposición «Matriz»
24 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El arte sigue agrandando su huella en Carballo. Desde ayer, y hasta el 19 de marzo, el Pazo da Cultura acoge la exposición Matriz, de Teresa Candal (A Coruña, 1975). Aunque vecina de Cambre actualmente, tiene un profundo vínculo con Carballo a través del colectivo de artistas Crea Formas. Horas antes de la puesta de largo de la muestra -que contó con música en directo a cargo de la Traskiband-, la propia artista desvelaba algunos detalles en Radio Voz Bergantiños.
Matriz es el trabajo de los últimos dos o tres años de Teresa. Un proyecto pictórico «moi honesto», «feito desde o ventre», tal y como describe. Es más, Matriz es como «unha metáfora do nacemento», como una energía que lo recorre todo, «unha vinculación coa natureza e co sentido máis máxico e místico da vida». A sus obras, Teresa le atribuye una «trasparencia total», es un volcado de emociones. Hay algunas que ven la luz por primera vez, para esta exposición, en tanto que permanecían escondidas en el estudio. Además, y a mayores de ese hilo, también hay información transversal en sus creaciones, como la propia poesía. Candal escribe «desde pequeniña» y hay trabajos que compaginan ambas artes -la pintura y la palabra-: todo un reto, en tanto que hallar la simbiosis, afirma, no es nada fácil. Lo que se persigue es un equilibrio estético y de contenido. Al igual que esa metáfora del nacimiento, los ojos, las miradas, son otro de los puntales de su creación: a veces, fragmentados, evocan la destrucción para volver a nacer «nesa matriz da que falo». Como un «círculo pechado».
Teresa empezó haciendo exposiciones de pintura en el instituto, lo que la animaría a estudiar Bellas Artes. Lo hizo en Pontevedra, donde se licenció y cursó la especialidad de Deseño e Audiovisuais. Tras pasar por Londres e ir encaminando su lenguaje, volvería a Galicia en el 2000. Desarrolló trabajos en materia de diseño gráfico, pero fue en el 2008 cuando volvió a su primera vocación: la pintura.
Tras las obras de la muestra Matriz no hay un ánimo de exposición. De hecho, Candal indica que hay técnicas distintas: desde las actuales, acuarelas y tinta china, hasta las más antiguas, como acrílicos u óleos sobre lienzo. «Cando pinto, non pinto pensando, pinto sentindo. Non hai nada detrás. Non hai un discurso. O discurso vén despois, cando o ves todo o xunto. Cando o ves e te das conta de que cando pintas hai algo traballando do que ti non es consciente. O meu traballo é totalmente orgánico, baléirome completamente», abundó la artista. En este sentido, cuando consigue ver su obra desde fuera, como si no fuese de ella, divisa que, más allá de conceptos abstractos, desnudos femeninos u ojos, hay una coherencia, no perseguida: «Vexo que non é un todo deslavazado». Así, indica que hay obras creadas en momentos muy distintos que, puestas juntas, parecen ser continuación. Obras como Protéxeme do que desexo son para la artista testimonio de que el arte, de tener finalidad, sería «traer luz a esa zona de sombra da que falaba Carl Jung, darte conta dos aspectos máis escuros da túa personalidade». Esa creación que ya ha atraído miradas, particularmente, significa para Candal «un canto ao empoderamento feminino». De todas formas, como incide, los cuadros tienen vida propia, y su visión puede no coincidir con la del que la ve: «O percorrido dun cadro remata sempre na ollada do espectador. A veces, explicar como ti ves a obra pode ser perigoso».
El arte de Teresa Candal ya forma parte de la agenda de Carballo. No solo atesora muestras, sino también talleres en la biblioteca Rego da Balsa, por ejemplo. Conocen sus creaciones, asimismo, en lugares como el Club Financiero de A Coruña o la Galería Sargadelos de Monforte. Ahora, el Pazo ofrece una nueva oportunidad de acercarse a ella.
En detalle
Exposición. «Matriz» es un proyecto pictórico que reúne obras de Teresa Candal de los últimos dos o tres años. Distintas técnicas, pero un hilo conductor y mucha presencia de lo femenino.
Dónde y cuándo. La exposición se puede ver en la planta -1 del Pazo carballés, hasta el 19 de marzo: de lunes a domingo, de 17.00 a 21.00.