Las fiestas y el buen tiempo retrasaron la hora del voto, o lo desanimaron

CARBALLO MUNICIPIO

diego alonso

Ricardo García Mira celebra desde Suecia su reedición del escaño

27 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La cita con las urnas de ayer fue una jornada tranquila, rutinaria, y por lo que se ve cansina para muchos, ya que el porcentaje de votantes fue muy inferior al de diciembre. Incluso los horarios fueron distintos en algunos lugares que estaban de fiesta, y los electores prefirieron esperar al final, ya de vuelta. En Carballo, por ejemplo, llamaba la atención la cola que había para coger papeletas en el Pazo da Cultura después de 7 de la tarde. El San Xoán y el buen tiempo se coló en estos comicios, lo mismo que en Baio, con la multitudinaria Festa da Carballeira. En Baio, por cierto, se estrenó como presidenta de mesa la bielorrusa de origen Tatiana Pankrátova, profesora de música y directora de coro. Por la noche, aún en pleno recuento del Senado, señalaba que la experiencia estuvo «bien», y con los votantes, «muy bien», pero que es algo cansado. «Muchas horas», dijo.

Las votaciones se realizaban desde las 9.00, pero alguno ya quería empezar antes. Así ocurrió en Oza-Carballo, donde una pareja insistía en depositar su papeleta a las 8.30 horas. Pero había que esperar. También hubo quien votó desde el coche. Así ocurrió con una mujer de avanzada edad de Santa Mariña, que se desplazó en coche al colegio de Xaviña-Camariñas y le llevaron la urna por su comodidad. Ya se había visto otras veces, incluso con una vecina de 110 años, en su día: Avelina Mouzo.

Muchos fueron los que votaron desde lejos, por correo. Tuvo que hacerlo (no pudo, por tanto, en Laxe) incluso Ricardo García Mira, que repite como diputado al ser el número dos del PSOE por A Coruña. Pero hoy tiene una cita ineludible en Suecia. En concreto, en Lund, donde se celebra la reunión bianual de la Sociedad Internacional de Estudios Ambientales.

En cuanto a los lugares donde depositar las papeletas, en diciembre se habían producido unas cuantas variaciones de colegios (algo habitual, de todos modos, en los sucesivos comicios). En esta ocasión mandó la repetición de espacios: 174 mesas para los electores repartidas en los 16 municipios de Bergantiños, Soneira y Fisterra.

La tranquilidad también se notaba en la calle, nada que ver con el frenesí de ocasiones precedentes. A mediodía y por la tarde, el descenso de participación fue notorio, a la vista de las tablas que se iban actualizando. En el primer avance, en Carballo era del 29,3, frente al 31,4 % de hace seis meses. Pero en el segundo, la diferencia era de 48,1 frente al 56%. Al final recuperó un poco; 64,4 frente al 70%. En A Laracha, incluso la participación mañanera fue mejor que la de diciembre, pero al final del día ya cayó en cinco puntos, algo similar -aunque con algunos matices- a lo que pasó en Cee y en otros concellos.