«Los mayores son fuente de sabiduría»

V. Couto, P. Blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

JOSÉ MANUEL CASAL

El centro carballés está celebrando su décimo aniversario y su responsable detalla la atención e iniciativas que ofrecen

11 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El centro Geriatros de Carballo está inmerso en la celebración de su décimo aniversario. Estos días, los residentes disfrutan de más actividades de las habituales. De estas y del papel de los mayores en la sociedad, entre otras cosas, habla la directora del centro carballés, Rosa Leis, oriunda de la Costa da Morte.

-¿Qué balance hace de estos años?

-Con Geriatros llevo casi seis años trabajando. A Carballo llegué hace año y medio, a finales del 2014, y era un centro que ya estaba consolidado. Lo conocía de visitarlo, porque procedo de otro centro, pero es una casa que tiene un equipo también muy consolidado, y donde se trabaja muy bien. Nuestra ocupación, ahora, es de rendimiento pleno, y me he encontrado con una calidad de trabajadores muy buena, por lo que estoy muy satisfecha de este balance de año y medio. Yo procedía del centro que tenemos en Oleiros, donde trabajé como técnico varios años, hasta que vine a ocupar aquí la dirección.

-¿A cuántas personas atiende actualmente Geriatros de Carballo?

-Alrededor de 150. En el último año hemos notado un incremento de mayores de la Costa da Morte. Cuando llegué, la mayor parte de los residentes procedían de Carballo hacia A Coruña. Es como si lo que son las puertas de la Costa da Morte estuviesen todavía un poco más cerradas. Es una zona un poco más rural y los mayores son más reacios al ingreso, pero ahora tenemos muchísimos residentes de esta zona, de Carballo hacia Fisterra.

-¿Qué cualidades ve precisas para el trato con los mayores?

-Has de tener una formación, porque es algo básico para un puesto de trabajo así, pero esa formación, además, tiene que tener un consenso con una parte de cariño, de saber estar... Es una cuestión de manejo. El mayor, al final, es como un niño, y has de saber llevarlo. Siempre hablo del consenso de esas dos partes.

-¿Diría usted que en estos centros se crea como una segunda familia?

-Por supuesto. Somos una gran casa. En ocasiones, y por proceder de familias en las que a lo mejor sus miembros ya han fallecido, diría que el residente que está aquí considera esta su casa. Su familia es esta. Lo sienten así y hay mayores que, cuando salen a sus domicilios, están deseando volver. Es algo importante: nosotros trabajamos para el mayor y para sus familias. Pretendemos dar calidad de vida y confortabilidad a la persona que reside con nosotros y, por otra parte, tranquilidad a sus familiares. A veces agotamos hasta el infinito las posibilidades de tener al mayor en casa y no nos damos cuenta de que en casa no disponemos de las ayudas técnicas y medios para atender a una persona en determinadas circunstancias. Siempre se ha pensado que va a estar mejor en casa, pero poco a poco esa mentalidad va cambiando. Cuando en algún caso nos preguntan si hay plaza, precios... siempre invitamos a venir a conocer el centro, hacemos una ruta... Mucha gente tiene una idea preconcebida que realmente no se ajusta a la realidad. Cuando se van, se van sorprendidos. Está cambiando mucho esa idea, pero aún hay gente que piensa que un lugar para mayores es un sitio donde está abandonados. Nada más lejos de la realidad.

-¿Somos conscientes del papel de los mayores en la sociedad? A veces nos olvidamos de su papel activo.

-Colaboramos con asociaciones y colegios y nos encanta, por ejemplo, cuando viene un grupo de niños y los mayores les cuentan la vida o los juegos de antes. Los pequeños se van maravillados. El papel de los mayores debe estar siempre al alza y creo que así se debería recordar: son fuente de sabiduría. Puedes aprender muchísimas cosas de ellos.

-¿Ha evolucionado mucho el servicio que se presta a los mayores en este tipo de centros, residencias...?

-En Carballo, a parte de los residentes que pernoctan, tenemos una parte de centro de día. La persona pasa la jornada aquí, pero pernocta en su casa. Creo que estos mayores, aquí, se sienten muy valiosos, parte de algo: tenemos casos donde hemos notado cambios muy importantes en su evolución desde su ingreso hasta ahora. En cuanto al equipo técnico, es muy importante que esté bien formado. Tenemos trabajador social, fisioterapeuta, animador sociocultural con el que hacen salidas, una coordinadora de enfermería y auxiliares, administrativo, estoy yo, el equipo sanitario... El mayor puede estar atendido en todos los aspectos [tienen además servicio de peluquería y de podología]. En este sentido, estamos trabajando mucho, y se ha notado un incremento, con las estancias temporales.

-Decía al inicio que también en los mayores ha cambiado la mentalidad con respecto a estos centros.

-Enormemente. Y tenemos un caso súper simpático: el marido de la señora estaba aquí ingresado y ella solicitó una plaza pública para poder estar aquí y con él, aunque ya venía por estancias temporales. Quería estar aquí. Por lo general la gente se adapta muy pronto: se ven queridos, apoyados, no están solos...