El Sysca avala la integración

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Natación: Doce jóvenes con diversidad funcional entrenan con el club carballés

10 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Son Javi, Lucía, Andrea, Sergio, Martina, Lola, Noé, Clara, Anxo, Sebas, Darío y Valeria. Son chavales de entre 5 y 22 años, sufren diversidad funcional y van a entrenar dos días a la semana, bien a la piscina Carballo Calero, bien a la Vila de Noia. Son puntuales como un reloj. Acuden acompañados de padres y otros familiares. Ni temporal, ni lluvia que valga. No hay excusas. Solo piensan en disfrutar de la natación. Sus miradas lo dicen todo.

Ayer tocaba entrenar en el vaso del polideportivo Vila de Noia. Javi Muñiz Suárez es el más veterano del grupo. A sus 22 años ya participó en campeonatos paralímpicos en «Oviedo y Castellón». Su especialidad, «el mariposa». Otros compañeros de Javi son mucho más pequeños y todavía no tienen claro su estilo. Pero raudos y veloces acuden a la llamada de una monitora, Verónica Naya, que, junto con otros compañeros, acompaña a los jóvenes a los vestuarios para cambiarse e iniciar el entrenamiento.

Agradecidos

Sus padres, veteranos en estas lides, esperan con paciencia. Son gente agradecida. Muy agradecida. Sobre todo al Sysca, que apostó por estos jóvenes a los que la directiva enroló para «fomentar a integración», apuntó el presidente de la entidad, Pedro Lantes.

Esta iniciativa partió de la agrupación carballesa Un paso máis, que preside Manuel Cantelar, y el propio Sysca. Mari Carmen Suárez, madre de Javi, el veterano del grupo: «Queremos que os nosos fillos se integren, que teñan un futuro, amigos, que poidan levar unha vida o máis normal posible dentro das súas circunstancias». Pedro Lantes va más allá: «No clube sempre tivemos claro que queriamos acoller xente con diversidade funcional. Nada mellor que o deporte para facelo, neste caso a natación».

Este proyecto, pionero en la comarca, se inició con ocho jóvenes. «Se lle digo a verdade non sabiamos como facelo, o que si tiñamos claro é que queriamos faceloz», explicó Pedro Lantes, quien se apoyó en los padres para saber cuáles son las necesidades de los chavales: «Supón unha responsabilidade moi grande porque cada neno ten a súa propia personalidade e os seus problemas. E para doce nenos precisamos de catro monitores e equipación e material específico para cada caso. E iso ten un custe, pero asúmeo o club coas aportacións dos socios».

Un año después, toca hacer balance y diseñar el futuro de este grupo: «Temos claro que seguiremos cos rapaces e pretendemos amplialo en función das nosas posibilidades. Temos xente interesada», comentó Lantes. Los padres hacen piña con el Sysca: «Foron os únicos que apostaron por estes rapaces». El presidente del Sysca se mostró sorprendido de lo que le responden cuando habla de este proyecto: «Dinme que arriscamos moitos, pero creo que facemos o que é lóxico».

Mientras, en el selecto club de los 12 no piensan en medallas, ni en podios, ni en competir. Solo en desarrollarse como personas, ser independientes, hacer amigos, labrarse un futuro y, sobre todo, que no les pongan trabas a la integración social.

Muchas dificultades para acceder a las subvenciones

El presidente del Sysca carballés destacó ayer las dificultades del club para lograr subvenciones para mantener este grupo de jóvenes. «O outro día fun ata a Deputación para presentar as bases para unha axuda específica para estes rapaces. O único que me dixeron foi que a subvención é para o resto de equipos do Sysca ou para estes rapaces», comentó con cierta resignación Pedro Lantes, quien añadió: «A única solución que me daban era facer un novo club con outro CIF e dalo de alta. Pero se son rapaces, que non van competir, van a pasalo ben, formarse como persoas e apoialos a ser independentes para cando sexan maiores».

Pedro Lantes ya tiene asumido que no le darán la ayuda, pero él, su directiva y los padres piensan en alternativas: «Algo faremos, seguro, o importante é que os nenos sexan felices e gocen co que máis lles gusta».

Javier Nieto es padre de Sergio, y, como otros progenitores, dicen que sus hijos sufren discriminación: «Nos centros educativos buscan a forma de non telo ocupado, de que non faga ningunha actividade, e queren que os envíes a outros centros máis especializados. Nós queremos que os nosos fillos, dentro das súas circunstancias, sexan tratados con igualdade». Beatriz Suárez, madre de Lucía Muñiz, aseguró que muchos centros no están preparados para acoger a críos con diversidad funcional: «Todos son problemas e nós queremos solucións», dijo.

El deporte como mecanismo de hacer piña

«Teño claro que o meu fillo non tería amigos se non fose polo Sysca e a natación». Así se expresó Mari Carmen Suárez, quien añadió: «¿Cres que habería nenos que sairían con Javi a dar un paseo? Xa cho digo eu: non». Y añadió: «Grazas ó deporte e a aposta do Sysca o meu neno ten un grupo de amigos, intégrase e fala coa xente. O deporte é unha excelente terapia para os nenos e tamén para os pais».