Sentido homenaje a «una luz en la fuga cósmica»

X. Ameixeiras / Á. palmou

CARBALLO MUNICIPIO

Compañeros de la promoción de la mili del 65 celebraron su 50 aniversario en la comarca.
Compañeros de la promoción de la mili del 65 celebraron su 50 aniversario en la comarca. s. g.< / span>

Compañeros y amigos celebraron con José María de la Viña su jubilación

01 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Poco imaginaba el viernes por la tarde José María de la Viña que la invitación para asistir unas horas después en Compostela a una charla sobre física acabaría por convertirlo en protagonista de un homenaje en toda regla: el que le quisieron tributar a este veterano profesor del instituto carballés Alfredo Brañas un grupo de colegas y amigos con motivo de su inminente jubilación.

Así pues, no hubo charla ni la física fue el eje del acto celebrado el viernes en el restaurante del Hotel Monumento San Francisco, aunque los organizadores sí parafrasearon al astrofísico y divulgador Carl Sagan para referirse al homenajeado como «una luz en la fuga cósmica».

Además, la erudición y el tono instructivo no faltó en las intervenciones ceremoniosas de una velada concebida a modo de «funeral de despedida», con solemnidad, pero también con mucho humor. José Facal fue el encargado de oficiar de maestro de ceremonias de una cena que comenzaron a gestar hace ya casi un año, en una madrugada de las fiestas de Malpica, Jorge Mira y Manuel Verdes, y a la que rápidamente se sumaron otros muchos colegas del mundo académico.

Todos ellos pusieron su granito de arena a la revista editada para la ocasión con aportaciones de un total de 38 amigos y articulistas y en la que siguiendo la estela de la famosa publicación Time, De la Viña fue declarado «man of the year». El humor y el reconocimiento sincero se fundieron así en un homenaje en el que también participaron otros amigos como Arturo Crespo o Constantino Freire. Este último, primer director del instituto en cuyas aulas aún sigue, por pocas semanas, impartiendo clase De la Viña, relató sus primeros pasos en el mundo de la enseñanza. Así, con los recuerdos de aquellos años y las anécdotas de su intensa trayectoria fue avanzando una noche para el recuerdo de todos los presentes-

SANTI GARRIDO

Recuerdos de la mili

Anécdotas y recuerdos estuvieron muy presentes en otra concurrida convocatoria celebrada también el viernes, aunque de naturaleza muy diferente. En este caso el homenajeado no fue una persona, sino el conjunto de los integrantes de la promoción de 1965 que hizo el servicio militar en el Parque de Automóviles de A Grela, en A Coruña, y que como vienen haciendo desde hace un decenio por iniciativa del carballés Ricardo Vilas Otero, volvieron a reunirse para disfrutar de una divertida jornada.

Este año es el de su 50º. aniversario, por eso Vilas volvió a hacerse cargo de los preparativos y brindó a sus compañeros un agradable paseo por su comarca, Bergantiños. Dos autobuses partieron de A Coruña a primera hora en dirección a Malpica, primera parada de un recorrido que los llevó también hasta Laxe y Corme para disfrutar de sus paisajes y compartir unos vinos y cuyo acto central se desarrolló en Balarés, escenario de la comida de confraternidad y de la imagen que acompaña estas líneas.

El recuerdo de los arrestos, los cortes de pelo al cero, las noches de guardia y otras peripecias varias trufaron una celebración en la que Vilas dio rienda suelta a su vena artística amenizando con su guitarra la sobremesa.

Entre los presentes hubo otros vecinos de la comarca, como el también carballés Armando Pombo Fraga o Maximino Calvo Bouzas, de Buño, además de otros veteranos reclutas llegados de Lugo, Ourense e, incluso, Oviedo. Quien no pudo estar este año fue el empresario José María Castellano, miembro también del grupo y partícipe de algún encuentro anterior.