Tania Liñares es intérprete de la lengua de los signos
21 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Tania Liñares Mallo es intérprete del lenguaje de signos y el jueves comenzó el curso de 30 horas que impartirá hasta mayo.
-¿Cuánto tiempo se necesita para aprender el lenguaje de los signos?
-No lo sé. Depende. Hay gente que muestra mucha facilidad y aprende enseguida y otra que tarda mucho tiempo o incluso que no lo consigue nunca. Las treinta horas de este curso hacen que solo se pueda aprender los signos básicos, lo más sencillo. Es algo que necesita bastante tiempo y dedicación porque es una lengua en definitiva.
-¿Cuáles son las principales dificultades que se presentan para el aprendizaje?
-Una de ellas es la estructura y que es una lengua visual, por lo que toda se desarrolla en un espacio. La expresión facial es muy importante.
-¿Por qué?
-Es fundamental para entender el mensaje, es como el tono o la intención en el lenguaje hablado. Al hacer una pregunta tienes que poner cara de pregunta porque de otro modo no se entiende.
-¿Las personas más expresivas aprenden antes?
-No siempre, porque intervienen otros factores.
-¿Y la estructura?
-Es distinta, los verbos van al final, igual que las negaciones y las partículas interrogativas. Por eso resulta complicada.
-¿Por qué eligió esta profesión?
-Lo veía en televisión y me interesaba. Trabajo por las mañanas en la Universidade de Santiago, interpreto a un usuario la carrera que está haciendo.
-¿Dónde estudió?
-En A Coruña, es un ciclo superior. Al principio es difícil ponerte a trabajar porque aunque hay muy buenos profesores el tiempo, que son dos años, no es suficiente.
-¿Cómo surgió dar clase a Aloumiños?
-Di una charla y surgió la demanda. Hay bastante en estos momentos. Unos tienen familiares sordos y otros son profesionales que las necesitan para su trabajo.
-Habrá muchos familias que quieran aprender...
-No a todos les interesa la lengua de los signos. Creo que debería ser más conocida, porque no hay mucha información. Incluso los que tienen parientes sordos no quieren aprender.
-¿Por qué razón?
-Creen que si lo hacen no hablarán. Consideran que es más importante acudir al logopeda o probar otras fórmulas. Es una elección de los padres y depende también de la opinión de los especialistas. Hay distintas corrientes.