Eduardo Puga Vila fue presentado ayer en una iglesia llena
23 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La iglesia parroquial de San Xurxo de Camariñas se quedó ayer casi pequeña para recibir a su nuevo cura, Eduardo Puga, natural de Bértoa (Carballo). El templo se llenó de feligreses, quienes le brindaron así una cálida bienvenida. El sacerdote fue presentado en su nuevo destino -se ocupará asimismo de A Ponte do Porto, Camelle y Carantoña- con una ceremonia presidida por el obispo auxiliar de Santiago, Jesús Fernández. Siguieron también el oficio el regidor camariñán, Manuel Valeriano Alonso de León, y la teniente de alcalde, Sandra Insua, además de familiares de Puga Vila.
Menos de 24 horas antes de su presentación, el sacerdote explicaba que su deseo era abordar en su primera ceremonia en Camariñas varias ideas. Primero, expresar su afecto a Jesús Nieto, el párroco anterior, fallecido el pasado mes de diciembre, y de quien tiene alabado su carácter afable y trabajador: «Comprendo a dor da xente». En su intervención de ayer mencionó a Nieto Baneira en varias ocasiones. Asimismo, Puga incidió en la idea de que llegará a Camariñas para servir a sus feligreses, para lo cual, dijo, también necesitará «a súa axuda». Su objetivo es trabajar juntos por una sociedad mejor y, en ese sentido, pidió a los ayer presentes que viesen en él «a unha persoa». Sus palabras fueron recibidas por los camariñáns con un gran aplauso.
Recaudación para el busto
En Camariñas, por otra parte, continúa la recaudación para dedicar un busto de piedra a Nieto Baneira. La escultura pretende ser un homenaje después de tantos años de dedicación y, según explicaban ayer desde la organización de esta iniciativa, la idea sería instalarlo en el primer aniversario de su muerte. Apuntan que los vecinos están colaborando bien para el proyecto e inciden en que es algo totalmente voluntario, por lo que el que desee aportar algo no tiene más que acercarse al banco Sabadell y hacer el ingreso que estime en la cuenta habilitada para tal fin. Desean hacer partícipe asimismo al nuevo sacerdote de ese cariño que todos le tributaban.