El BNG no cree que el problema sea la puesta en marcha, sino el dinero para que funcione

La Voz

CARBALLO

23 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El edil del BNG, Serxio Domínguez, que desde el principio defendió prácticamente en solitario la gestión directa, dice sentir «vergoña» por el punto al que han llegado y no ser capaces de abrir una piscina después de tanto tiempo. Aunque ve con buenos ojos el apoyo de la Deputación, a su juicio «iso non cambia nada», porque el problema no es poner las instalaciones en condiciones, que también, pero ya reservaron para ello 40.000 euros, sino el dinero que hay que darle a las empresas para que se hagan cargo de la gestión.