El arte efímero llenó de creatividad la noche más festiva

á. P.

CARBALLO

ANA GARCÍA

24 jun 2017 . Actualizado a las 23:30 h.

El concurso de cachelas lleva 30 años poniendo el toque de arte a la noche carballesa de San Xoán. Y ayer volvió a cumplir con las expectativas y a sembrar la capital municipal y sus aledaños de esmeradas creaciones, lo que dificultó la labor de los miembros del jurado a la hora de decidir los ganadores. Aunque finalmente hubo consenso.

El primer premio fue para los autores de A dilixencia do Oeste construida en San Lois (Ardaña), según anunció el jurado poco después de las 23 horas, tras más de tres horas de recorrido y análisis de las 14 cachelas presentadas a concurso. El segundo galardón se lo llevó Polar Express (O Sisto); el tercero, El pirulí (calle Carré Aldao), y el cuarto, Móllate (río Anllóns), una obra que había sufrido un acto vandálico la noche anterior y que tuvo que ser ligeramente reconstruida de urgencia ayer por la mañana. También hubo dos accésits: para O paisano da Queiroa (O Sisto) y O desembarco vikingo (calle Buxo).