Agua para disolver los abonos y también los herbicidas

La Voz

CARBALLO

27 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El agua no solo es necesaria para el crecimiento de las patatas, sino que sin ella no se pueden aplicar los tratamientos. Es imprescindible para disolver tanto los abonos como los herbicidas y cuando se habla de rentabilidad económica de un cultivo es un factor muy a tener en cuenta.

En el caso de las patatas todavía es más importante, porque el 90 % del tubérculo es agua. Es determinante para el calibre y el peso de cada pieza y, por tanto, para evaluar el rendimiento de la cosecha por hectárea.

El próximo mes es necesario que llueva para preparar la tierra y alimentar la cosecha que ya está en la tierra, que esta vez es una cantidad bastante importante. Pero además, el pleno verano tendría que ser lluvioso también, porque entre mediados y finales de julio la patata que deberá recogerse en noviembre empieza a crecer. Para entonces la planta habrá alcanzado su máximo desarrollo vegetativo y los tubérculos iniciarán su crecimiento. El momento crítico es a los 45 o 50 días de la plantación.

Coincidirá el proceso con la época de más calor y también más sequía, por lo que el riego por goteo es una solución que gasta poca agua y tiene muchas ventajas. La cuestión es si dará tiempo de abrir pozos o realizar enganches.