25 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.
A perro flaco todo son pulgas. Determinados funcionarios huyen de los concellos con más deuda, los que llevan mucho tiempo de descontrol o los más conflictivos. En estos ayuntamientos tienen grandes problemas para llevar a cabo las principales tareas administrativas. Se retrasan los presupuestos, los pagos y la confección de las cuentas. Así, la degradación avanza proporcionalmente. Lo peor es que la solución no parece a la vista.