«Fran», el buey que busca pareja

Susana Acosta
Susana Acosta A CORUÑA / LA VOZ

CARBALLO

José Souto, arteixano y criador, detalla las características del animal

09 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«Este é un fora de serie», comenta José Souto. Pese a ser su dueño, está asombrado con las dimensiones de Fran, un buey de tan solo cinco años que ya apuntaba maneras cuando lo compró hace tres y que mide 1,80 metros de alto por 2,87 de largo. Tal es su constitución que, por más que lo intenta, no le encuentra compañero de aventuras: «É que está moi desenvolvido para a súa idade», comenta este vecino de Arteixo. En los catorce años que lleva criando bueyes, pocos ha visto como Fran: «O nome é polo xogador do Deportivo. É que eu son blanquiazul, ¿sabes?», comenta.

Souto explica que el compañero de Fran debe ser de las mismas características: «Ten que ser grande coma el. Non vale un más grande e outro máis pequeno», dice. Y por más que busca en las páginas de contactos para bueyes no hay manera de encontrar otro igual que Fran: «É certo que traballan en parella, pero para traballar xa está a maquinaria, o que pasa é que vendese mellor así que por separado», comenta, mientras sus nietas Uxía, de nueve años, y Candela, de cuatro, no pueden evitar que les intimide la presencia de Fran: «Tomarónlle medo. Sempre me din que queren vir comigo, pero non é o mesmo que me vexan darlle de comer que agora que o teñen así tan cerca», asegura Souto. Mientras, Candela mira con recelo a Fran, sin imaginarse que son animales tan grandes como dóciles. Y es que imponen.

Sobre todo Fran, que puede superar fácilmente los 1.700 kilos: «Non o pesei, pero debe andar por aí, aínda que son moi guiados. Están pastando e en canto os chamo xa veñen correndo», asegura este criador de bueyes que los maneja como si de auténticos caniches se trataran.

Souto tiene en sus propiedades una veintena de bueyes: «Tres marchan o luns e o mércores veñen sete de Portugal e despois outros cinco entre marzo e abril», indica este hombre que lleva catorce años dedicándose a la cría: «Estes tres que marchan o luns van para o restaurante O Capricho de León». Es uno de los principales clientes que tiene este vecino de Arteixo desde hace ya años.