Las quejas persisten por la escasez de conexiones y los precios elevados
23 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Numerosos usuarios del transporte público interurbano o intercomarcal de la Costa da Morte evalúan de manera crítica la gestión de este servicio público (autobús: el tren ya se perdió hace un siglo). Diversos alcaldes consultado coinciden y apuntan que es necesaria una solución urgente para paliar el problema. Que, por otra parte, viene de lejos.
Hay avances, pero lentos. Sin duda, la entrada de Carballo en el plan de transporte metropolitano de A Coruña aliviará la economía de los usuarios habituales, pues el precio de tique bajará notablemente. Es el caso de Diana Mata, que considera que era una «necesidade absoluta», pues un usuario habitual (depende de varias circunstancias) podría ahorrar hasta 600 euros anuales. Aún así, opina que se debería haber implantado «mucho antes» porque no ve «normal» que se tenga que gastar una media «de 9 euros» al día como estudiante.
Los carballeses tampoco se olvidan de la cuenta pendiente que existe con el plan de transporte con Santiago, recientemente rechazado. Alba Deus Rivadulla muestra su descontento con la escasez de opciones: «As conexións entre Carballo e a capital de Galicia son vergonzosas». También considera un atraso no tener «unha tarxeta propia da empresa para evitar ter que andar con cartos en efectivo». A José Manuel Moreno, otro carballés que solía coger el bus hacia la capital por temas laborales, le parece «muy caro» el tique.
El edil de Obras e Servicios de Carballo, Luis Lamas, confirma que seguirán insistiendo a la Xunta: «Somos conscientes da falta de liñas cara Santiago e das queixas por parte dos estudantes. Por iso seguiremos reivindicando a entrada da capital de Bergantiños».
En Fisterra siguen flaqueando las líneas existentes, y eso que ya hubo mejoras con respecto a época anteriores. En pleno verano, con la elevada cantidad de peregrinos en la comarca, la conexión con otros puntos (A Coruña o Santiago, y también Muxía), sigue siendo deficitaria. No solo peregrinos, también vecinos que acuden habitualmente al hospital de Cee.
Adán Traba, que suele desplazarse hasta A Coruña en bus, apunta: «Pago 14,55 euros, un prezo elevadísimo», dice, además de quejarse de los servicios. Por su parte, Sara Ares, trabajadora de un punto de información privado de Fisterra, señala: «Cada vez hai máis interese por visitar Muxía dende aquí, e os peregrinos demandan moito unha excursión que facemos na axencia para non ter que ir collendo varios buses».
El alcalde fisterrán, José Manuel Marcote, cree que hay que mejorar la red interna de transporte en toda la Costa da Morte: «Teríase que crear un plan conxunto para todos os concellos». Comparte esta opinión el regidor de Muxía, Félix Porto: «É imprescindible mellorar as conexións en toda a Costa da Morte. Dende a Xunta deberían facer algo». Lidia Fernández, que reside en Quintáns, alega que el precio que tiene que pagar le parece excesivo para «os quilómetros que se recorren e o tempo que se tarda en chegar».
En Vimianzo la situación no cambia mucho. El alcalde, Manuel Antelo, reconoce la «precariedad» del transporte público. Prosigue: «Creo que existe discriminación, pois nos plans de transporte metropolitano deberían incluírse as zonas rurais que rodean estas urbes». Antelo también apunta a la Xunta y pide «unha resposta»para crear una red de transporte moderna, «adaptada aos novos tempos». Hace hincapié en que se lleve a cabo un plan en función «do interese público» y no teniendo en cuenta «o interese das empresas concesionarias».
La vimiancesa Alejandra Rama Amigo solicita una mejora en las líneas con Santiago porque se desplaza a la capital todas las semanas. «Se teño clase ata as dúas xa non podo volver á casa ata as 8 da tarde, porque o outro que hai déixame en Baíñas e non me poden vir recoller», comenta la vimiancesa.